Britney Spears ha tomado una decisión muy radical y tiene todo nuestro apoyo. La Princesa del Pop ha tomado cartas en el asunto de su tutela y, con tal de no darle ni un dólar más a tu padre, James Spears, ha decidido no volver a cantar hasta tener el control de su vida y de sus finanzas.

La decisión – que ha entristecido mucho al colectivo #FreeBritney – fue anunciada muy a su estilo en su cuenta de Instagram, y la cantante tiene el apoyo de todos sus fans más que nunca. “Acéptame como soy o besa mi trasero, come caca y pisa Legos”, dice la imagen compartida en Instagram que tiene más de 2 millones de reacciones y muchos comentarios de apoyo.

“Para quienes eligen criticar mis videos de baile… no voy a actuar en ningún escenario pronto con mi papá manejando lo que uso, digo, hago o pienso. Lo he hecho durante los últimos 13 años. Prefiero compartir videos desde mi sala en lugar de un escenario en Las Vegas, donde algunas personas estaban tan lejos que ni siquiera podían darme la mano y terminaba fumando hierba cada vez… lo cual no me importó, pero hubiera sido bueno poder ir a un maldito spa después”, dice la publicación de Instagram.

“Y no, no voy a ponerme mucho maquillaje y tratar de intentarlo en el escenario de nuevo y no ser capaz de hacer un trato real con las remezclas de mis canciones durante años y rogar por poner mi nueva música en mi programa para mis fans… ¡así que renuncio!”, añade el mensaje.

Y luego se fue contra su familia y la gente que no la critica: “¡Mi supuesto sistema de apoyo me lastimó profundamente! Esta tutela mató mis sueños, así que todo lo que tengo es esperanza y la esperanza es la única cosa en este mundo que es muy difícil de matar. ¡Sin embargo la gente todavía lo intenta! No me gustó la forma en que los documentales sacan a relucir momentos humillantes del pasado. ¡Ya he pasado mucho de eso y lo he sido durante mucho tiempo!”.

Britney está tomando decisiones muy difíciles pero muy firmes respecto a su futuro, y acaba de tener una pequeña victoria en la Corte, que le puede ayudar mucho en este caso. La jueza Brenda Penny, le concedió la libertad para elegir al abogado de su preferencia para que la defienda en este caso contra la tutela establecida desde hace 13 años a nombre de su padre.

Cuando el juicio comenzó, Britney fue considerada mentalmente incapaz de elegir su propia representación legal, por lo que se le asignó un abogado. Pero ahora, Britney tuvo la posibilidad de contratar al abogado que más le convenga, y el elegido fue Mathew S. Rosengart – un ex fiscal federal que ha trabajado con famosos como Sean Penn y Steven Spielberg – tras la renuncia de su antiguo abogado, Samuel D. Ingham III.

Ojalá que las cosas se vayan acomodando favorablemente para Britney y que pronto tenga las riendas de su vida.

*IMAGEN: Getty Images