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Las palabras de la duquesa de Cambridge, Kate Middleton, confirman que sin importar que formes parte de la realeza o qué tanto dinero y fama puedas tener, la maternidad y el parto son momentos de múltiples emociones que las mujeres experimentamos. Ella, como cualquier otra mujer, se sentía feliz de convertirse en la mamá de George, pero a la vez se sentía asustada.
Durante una entrevista que ofreció a Giovanna Fletcher para su podcast Happy Mum, Happy Baby, la esposa de Prince William contó sobre la ansiedad que sintió justo antes de dar a luz: “Sí, un poco aterradora, un poco aterradora, no voy a mentir”, dijo Kate sobre su llegada al Hospital St Mary en Londres, para dar a luz a su primer hijo, pero también aclaró que todo en torno al nacimiento de George fue algo positivo para ella y William. “Todos nos habían apoyado mucho y tanto William como yo estábamos muy conscientes de que esto era algo por lo que todos estaban entusiasmados y, ya sabes, estamos enormemente agradecidos por el apoyo que el público nos ha brindado y, de hecho, para que podamos para compartir esa alegría y aprecio con el público, sentí que era realmente importante. Pero igualmente se combinó con un bebé recién nacido y padres inexpertos, y la incertidumbre de lo que venía, por lo que hubo todo tipo de emociones encontradas”, aseguró.
Pero a pesar de esta incertidumbre, Kate aclaró que convertirse en madre la hizo muy feliz: “Asombroso, asombroso. Es extraordinario como he dicho. ¿Cómo puede hacer eso el cuerpo humano? Es realmente extraordinario. Fue muy dulce. Me sentí aliviada de que fuera un niño feliz y saludable”.
La duquesa agregó que cuando ella y William se fueron a casa con George, tenían los mismos nervios que cualquier padre primerizo, porque además de los retos naturales que implica la paternidad, ellos tenían a los ojos del mundo puestos sobre ellos. Por ejemplo, recuerda el momento en que William puso por primera vez la silla del carro para bebé: “Pensamos: ‘¿Qué hacemos? ¿Cómo se supone que funciona?’ Incluso habíamos intentado practicar con un bebé pequeño, como una pequeña muñeca, en casa, pero sabes que nunca funciona de la forma en que se planea”.
Respecto al momento del parto, Kate confesó haber practicado una técnica llamada hypnobirthing para sus tres embarazos. Se trata de una forma de meditación utilizada para ver el nacimiento como algo positivo a través de visualizaciones, así como para ayudar a superar el dolor. “El hypnobirthing fue enormemente poderoso y como las náuseas matutinas habían sido tan malas durante el embarazo, siempre llegué contenta al parto, porque era un acontecimiento que sabía que iba a tener un final. Vi el poder de la meditación y la respiración profunda cuando estaba realmente descompuesta. Me di cuenta de que era algo que podía controlar”, dijo la madre de George, Charlotte y Louis.
¡Qué buena anécdota! Siempre es bueno confirmar que todas las mujeres pasamos por los mismos miedos e inseguridades. ¿Se atreverá a tener un cuarto hijo?
