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La realeza de nuevo está de cabeza o al menos es lo que parece tras las recientes revelaciones del nuevo libro Endgame: Inside the Royal Family and the Monarchy’s Fight for Survival (El fin del juego: La lucha por la supervivencia de la Familia Real y la Monarquia) de periodista Omid Scobie.
Según Omid, la familia real está en una batalla por permanecer relevante en medio de una sociedad cambiante y en muchos casos, en desacuerdo con la monarquía.
Estas son las revelaciones más importantes del libro, que, según el autor, están basadas en fuentes cercanas a la familia real británica.
Kate Middleton ignoró la situación de Meghan Markle
Según el autor del libro, Kate es una persona “fría si no le gusta alguien” y aseguró que “Este es un lado de Kate sobre el que rara vez se escribe”. Además, el autor critica que mientras defendía causas de salud mental “ignoraba los gritos de ayuda” de Meghan.
“Abogar por causas de salud mental (la salud mental de las madres, para el caso) pero ignorar los gritos de ayuda de su propia cuñada parecía fuera de lugar para alguien que el público conocía como dulce”, escribió.
La relación entre el rey y William no es perfecta
Omid escribió que la relación entre el rey Carlos III y su hijo mayo, el príncipe William es también conflictiva, pero los une su desacuerdo con el actuar del príncipe Harry.
“La desconfianza y la animosidad latente entre padre e hijo no son nada nuevo en su relación laboral”, escribió.
Además, describió a William como un “heredero al trono hambriento de poder”.
La incapacidad del rey para poner orden en la familia
Según el libro, el rey Carlos todavía está lidiando con las consecuencias de su incapacidad para reunir y comandar a su propia familia”, escribió. “Su ineptitud en torno a la saga de Harry y Meghan ha convertido a la pareja en los disruptores que se temía que se convirtieran en un principio”, aseguró.
Seguramente en los próximos días surgirán nuevas revelaciones contenidas en el libro, sin embargo, parece que aún le queda un largo camino a la familia real británica para encontrar su nuevo lugar en el mundo cambiante cada vez menos, al parecer, dispuestos a apoyar a la monarquía.
