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Blake Lively y Ryan Reynolds se proyectan como una de las parejas de famosos más estables y divertidas. Pero no es cosa del destino, ellos tienen un acuerdo que han cumplido de manera rigurosa, asegurándoles el éxito.
De acuerdo con Blake, ella y Ryan Reynolds acordaron “no trabajar al mismo tiempo” cuando empezaron a salir. Fue durante una entrevista con su coprotagonista de Sisterhood of the Travelling Pants, Amber Tamblyn, en la serie de videos Substack de Tamblyn, que la actriz habló de su matrimonio.
“Cuando Ryan y yo nos juntamos, establecimos la regla de no trabajar al mismo tiempo”, le dijo Lively a Tamblyn. “Para que siempre podamos priorizar nuestra vida personal”.
Los actores comenzaron a salir en 2011, cuando ella todavía estaba trabajando en Gossip Girl y tenía una agenda exigente.
“Estoy acostumbrado a trabajar duro y seguir y seguir y seguir y no parar”, dijo Lively. “Especialmente, ‘Gossip Girl’ fue seis años de mi vida, y a veces estábamos filmando tres episodios a la vez”.
La decisión de no tener horarios de trabajo superpuestos requirió mucho esfuerzo para mantenerla, dijo la actriz.
“Eso requiere trabajar muy duro cuando no lo estamos. Al igual que la planificación financiera y el mantenimiento de eso, se necesita equilibrio”, aseguró Lively.
“Creo que quiero que mis hijos tengan un horario bastante normal. Quiero decir, durante muchos años, cuando mi esposa Blake filmaba una película, yo no filmaba una película”, dijo Reynolds durante una entrevista de LinkedIn en 2021. “Y yo estaría con los niños y viceversa, así que hicimos una especie de compensación. En realidad, nunca trabajamos al mismo tiempo”.
Blake y Ryan se casaron en 2012 y tienen cuatro hijos: James, 9, Inez, 7, Betty, 4 y un niño de un año cuyo nombre aún no han revelado. Aunque han sido vistos en público con sus hijos, los dos prefieren mantener a su familia fuera del centro de atención.
