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¡Es increíble! El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, culpó a varias organizaciones no gubernamentales que trabajan a favor del medio ambiente —entre ellas Leonardo DiCaprio Foundation— de ser responsables de los incendios que agresivamente dañaron a la Amazonia hace un par de meses. Pese a todo el trabajo que estas han realizado directamente en la selva de Brasil, y del dinero que han logrado recaudar para combatir los incendios, Bolsonaro se deslinda de toda responsabilidad.
Por si fuera poco, el presidente atacó directamente al actor y activista. “Leonardo DiCaprio es un tipo muy simpático, ¿no es así? Dando dinero para prender fuego en la Amazonia”. Según él, el dinero que donó Leo —y otras ONGs internacionales como WWF— fue destinado a la organización Alter do Chão, que se dedica a apagar los incendios, y que en palabras de Bolsonaro, son “delincuentes que promueven incendios intencionalmente”.
El actor, comprometido con acciones en contra del cambio climático, no se quedó callado y respondió al presidente de Brasil en un comunicado difundido en sus redes sociales: “En este punto de crisis para la Amazonia, yo apoyo a la gente de Brasil trabajado para salvar su patrimonio natural y cultural. Ellos son increíbles, un ejemplo conmovedor y humilde del compromiso y la pasión necesaria para salvar el medio ambiente. El futuro de estos ecosistemas irremplazables está en juego y estoy orgulloso de estar con los grupos que los protegen. Aunque merecen apoyo, no financiamos las organizaciones mencionadas. Me mantengo comprometido a apoyar a las comunidades indígenas de Brasil, gobiernos locales, científicos. educadores y público en general que está trabajando incansablemente para asegurar la Amazonia para el futuro de todos los brasileños.
Todas estas acusaciones se han realizado en torno a la Cumbre del Cambio Climático 2019, también conocida como COP25, que inició hoy en Madrid, España. De hecho, Brasil era la sede destinada para este evento, pero luego de que en su campaña electoral Jair Bolsonaro dejara ver claramente su posición respecto al cambio climático —sin políticas medioambientales— el gobierno retiró su oferta para albergar dicha cumbre internacional. Y obviamente el mandatario brasileño no asistirá a la COP para no tener que enfrentar ni explicar sus decisiones en materia de medio ambiente.
