Ryan Gosling y su pareja, la actriz Eva Mendes, no permiten que sus hijas vean Barbie a pesar de ser grandes admiradoras de la muñeca. Esmeralda de nueve años, y Amada, de siete, incluso visitaron a su papá en el set de rodaje, pero no han visto la película.

Ambos se pusieron de acuerdo y decidieron que no permitirían a sus hijas ver la película que se colocó como el filme con más recaudación en la historia de Warner Bros, al acumular 1,400 millones de dólares en todo el mundo.

“No sé si deberían ver a su padre como Ken. No sé qué edad es buena para ver a tu padre hacer eso. Llega a un punto bastante loco”, dijo Ryan en una entrevista para E! News.

Warner Bros.

“Han visto algunas partes y vinieron al rodaje un día cuando estaba haciendo un gran número musical”, agregó.

De hecho, el actor comentó que gracias a sus hijas tuvo un acercamiento al personaje de Ken y parte importante en su decisión de aceptar hacer el filme.

“Sabía que les encantaba porque siempre querían ir a la tienda Target, y cuando íbamos, se escapaban lentamente hasta el pasillo de Barbie. Y mi mujer y yo nos dimos cuenta:, ‘Ok, creo que ya es hora de dejarlas tener Barbies’. Pero tenía cero interés en Ken, lo cual también fue bastante interesante. Participar en la película es una forma de hacer algo para ellas“, destacó.

Ryan y Eva/Getty Images

Ryan y Eva trabajaron juntos fue en 2011 en la película Cruce de Caminos se enamoraron en el set. Y han sido una pareja que les gusta permanecer de bajo perfil como una forma de proteger su relación. Eva explicó por qué nunca ha querido publicar imágenes de su vida diaria.

“Siempre he tenido un límite en lo que se refiere a mi chico y a mis hijas. Hablaré de ellos, por supuesto, con límites, pero no publicaré imágenes de nuestra vida diaria. Mis hijas todavía son tan pequeñas y no entienden qué significa realmente que compartan su imagen, no tengo su consentimiento”, aseguró.

Dos padres que cuidan a sus hijas a pesar de las modas o estilos de crianza. Seguramente crecerán y podrán ver el filme que logró reivindicar la muñeca más famosa del mundo.