En el backstage de la campaña se respiraba un ambiente familiar y es que el fotógrafo Karim Sadli ya conocía a Lily-Rose desde Los Ángeles, gracias a su mamá Vanessa Paradis, actriz, modelo y cantante francesa. Cuando se reencontraron en el shooting, todo fluyó de manera natural.

“Virginie Viard estaba buscando a alguien que pudiera personificar la frescura, un cierto candor, la seguridad y libertad de la feminidad, un espíritu divertido”, confiesa Sadli. Por eso no es extraño ver a Lily-Rose en esta campaña. Esta chica de 21 años, hija de Vanessa Paradis y Johnny Depp, tiene lo mejor de ambos mundos: ese je ne sais quoi único en la mayoría de las francesas y ese dejo rebelde que hasta cierto punto se convierte en un enigma, sello distintivo de su famosísimo papá. Nadie mejor para llevar la nueva campaña de la colección crucero de Chanel.

En una casa en Francia se recrearon los recuerdos de la Riviera, los años sesenta, las actrices legendarias que destilaban glamour alrededor de una piscina donde Lily representa la frescura, ligereza, simplicidad y relax de la colección crucero de Chanel. Tweed, transparencias, cadenas usadas a la cintura y bottoms de talle alto que nos recuerdan a las fabulosas pin-up girls.

Disfruta de este making of con esa actitud effortless chic, las dos palabras que mejor definen a esta colección crucero que nos lleva de viaje por el Mediterráneo, muy al estilo Chanel.

*IMÁGENES: Cortesía Chanel