Es posible que no lo sepas, pero la lluvia, la humedad o los cambios de temperatura son los grandes enemigos de nuestro peinado, especialmente si el cabello es poroso y absorbe la humedad de forma excesiva, porque tenderá al encrespamiento.

Si tu cabello se enreda y absorbe la humedad de forma excesiva, tenderá a experimentar un encrespamiento notable. ¿Es tu caso? Entonces, sigue nuestros consejos.

Los agentes atmosféricos ejercen un gran poder sobre todo tipo de cabellos, incluso los más finos están condicionados por factores como la lluvia o la humedad, ambiental o corporal, pues el volumen del cabello decae. Esto se debe a que, frente a temperaturas elevadas, el cuero cabelludo desprende calor, sudor y grasa.

Desde In-Viso, uno de los espacios especializados en la salud de tu cabello y de su apariencia, nos ofrecen una serie de consejos que, sin duda alguna, serán de gran utilidad en diferentes situaciones.

Tipos de cabello

Si tu cabello es rizado y encrespado, te recomendamos un tratamiento orgánico anti-frizz que moldeará tus rizos sin que el cabello pierda su forma natural, pues no modificamos su estructura ni la dañamos.

También es posible que tengas un evento especial y desees un cabello bonito con el que deslumbrar. En ocasiones como éstas, ¡que el pronóstico de lluvia o humedad no sea un impedimento! Desde In-Viso nos recomiendan productos exclusivos que bloqueen la humedad, un 70% más efectivo que los tradicionales, que generalmente contienen siliconas y aceites.

¿Y qué ocurre si llega la lluvia de forma inesperada?

Para situaciones como ésas, una buena solución son los peinados rápidos, sin necesidad de lavado previo. Una coleta, un moño o una trenza son una solución eficaz y sencilla. ¡Pero no las únicas! El engominado también puede ser una opción muy interesante para cabellos cortos o melenas midi. Esta alternativa controla el cabello y, además, aporta un aspecto fresco.

También nos aconsejan tener siempre a mano un champú seco, ideal para disimular el cabello sucio y sacar volumen en dos minutos, ya sea por lluvia, por una sesión de gimnasio o por una subida de temperatura corporal nada oportuna. Para aplicarlo, basta con pulverizar, esperar 30 segundos, cepillar… ¡y lista!

Si llueve, basta con una coleta con volumen en raíces. Junto al champú en seco, también es ideal un peine con el que evitar esos pelos que, a causa de la lluvia, se han descontrolado.

*Imagen: Getty Images