Issey Miyake revolucionó y aportó al mundo de la moda. Mientras que su visión también transformó el universo de la perfumería. A principio de los años noventa salió a la venta su primer perfume, L’Eau D’Issey. El diseñador deseaba plasmar lo que se imaginaba como el aroma del agua en la piel de la mujer.

A lo largo de sus 22 años de historia el éxito siempre lo ha acompañado. Pues en el mundo de la perfumería L’Eau D’Issey, de Issey Miyake es considerado una de las composiciones olfativas más icónicas. En 1993 se le reconoció con el galardón a la mejor fragancia femenina en los Fragrance Foundation Awards. También ellos mismo lo reconocieron en 2011 al integrarlo al Salón de la Fama de las Fragancias. Además, en 2020 ganó la distinción en la categoría de “Fragancia Clásica” en los premios The Duftstars Awards, organizados por la Fundación de Fragancias de Alemania.

“Quiero un perfume que no se sienta a perfume pero que huela a agua”. Así describía sus deseos aromáticos Issey Miyake.

El encargado de transformar en aroma la visión del diseñador japonés fue Jacques Cavallier, actual maestro perfumero de Louis Vuitton. Cavallier creó una obra maestra que lo marcó y que siempre recordará (cómo lo hizo hace justo un año cuando tuve la fortuna de entrevistarlo en Grasse).  Pues esta primera y exitosa composición olfativa disparó y contribuyó al reconocimiento de esta nariz.

“Mi primer perfume fue Eau d’Issey. Fue un punto de inflexión importante para mí creación. Cada vez que lo huelo, siempre me lleno de emoción”. Afirmaba Cavallier.

El diseño de la botella

El minimalismo y la modernidad de la estética creada por Miyake se plasma también en el diseño puro de la botella. Es elegante y minimalista. Además, concuerda con la percepción de Issey Miyake sobre la feminidad.

La presencia de agua también se refleja en su forma. Pues hace alusión a los mini pedacitos de vidrio con este acabado mate que se pueden llegar a encontrar entre la arena en algunas playas cerca del mar. Sobre su tapa el diseñador aseguraba “es la forma de la luna sentada a lo alto de la Torre Eiffel”.

Las notas

Su aroma es inconfundible pertenece a la familia olfativa Floral Acuática. Entre sus notas destacan:

Notas de salida: melón, fresia, agua de rosas y Calone (la materia prima que da ese toque de brisa marina)

Notas de corazón: lirio de los valles, azucena, peonía y clavel.

Notas de fondo: almizcle, nardos, cedro, sándalo y ámbar.

 

Justo 22 años después de su creación muere Miyake. Al igual que el gran legado que deja en el mundo de la moda, el aroma y el concepto de L’Eau D’Issey permanecerá para siempre.