Moda
Chiang Mai es uno de los destinos más populares de Tailandia. Montañas, templos, santuarios de elefantes, actividades deportivas, mercados de comida, arrozales y productos artesanales componen gran parte de su atractivo. Muchos hoteles de lujo habitan la región. Entre ellos, destaca uno, famoso por ser uno de los más lujosos, onerosos y exclusivos del país. ¿Qué tiene ese hotel tan prestigioso? ¿Cómo se vive un retiro del mundo en sus brazos? Nos hospedamos en el hotel más lujoso de Chiang Mai y te lo contamos.
Un refugio entre arrozales
En el Four Seasons de Chiang Mai, la belleza de la región de Chiang Mai traspasa una nueva dimensión. Situado en Mae Rim, en una zona rural al exterior de Chiang Mai, el extenso terreno que ocupa el hotel es verdaderamente espectacular. Las distintas suites, edificadas por casetas de dos pisos, algunas villas y los dos restaurantes del hotel se reparten en armonía alrededor de un majestuoso arrozal. En un lado, una piscina ocupa un pequeño espacio, ofreciendo a los huéspedes chapuzones imborrables, con unas vistas incomparables.
En un piso superior, otra piscina con hamacas verdes y sombrillas le ponen una nota de color al conjunto. Debajo, un gimnasio muy equipado, con sala de boxeo incluida, vestidores con sauna y máquinas de última generación, cumple con la promesa de alto nivel ‘Wellness’ del lugar
El hotel Four Seasons es el más lujoso de la región de Chiang Mai y regalarte un retiro ahí te garantiza una desconexión espacio temporal absoluta.
DORMIR ENTRE ALGODONES
…O más bien entre arrozales, con el sonido de los grillos de fondo, en unas suites impresionantes. Me hospedo en un Upper Garden Pavilion, una suite de unos 70 metros cuadrados situada en un segundo piso, con vistas a los jardines y arrozales.
Cada suite tiene una terraza con camas ‘de día’ y el diseño interior se compone de sedas, algodones, maderas y objetos artesanales. Cada día, dos servicios de limpieza pasan por tu dormitorio (la segunda se hace por la noche, para prepararlo para la noche) y dispones de una cesta de frutas tropicales enorme que se renueva cada mañana.
El baño de la suite también es verdaderamente precioso: bañera, ducha, doble lavabo de mármol, amenities de Natura Bissé… y hasta una suerte de sofá sin respaldo céntrico. El lujo se ve en cada detalle y eso te recuerda que te estás hospedando en el hotel más lujoso de Chiang Mai.
Soulful awakening
Descansar mejor para vivir mejor
El hotel ofrece un programa Wellness para cuidar la mente y el cuerpo durante tu estancia. Creado por la directora del spa, Saowapa Thumapun, especialista en fisioterapia, medicina deportiva y ciencias de la nutrición. Dicho programa está hecho a medida del que lo contrate y su objetivo es el de tratar todos los aspectos del bienestar del huésped: el físico, el mental y el espiritual. ¿El objetivo? Lograr una vida más balanceada, equilibrada. Y eso empieza por un buen descanso.
En la primera noche, antes de dormir, una bandeja con una máscara de ojos, scrub para el cuerpo, una vela aromatizada y un jabón artesanal llegan a tu habitación. El kit va acompañado de una nota que marca los pasos de un ritual pre-cama para descansar mejor. Todos los componentes de la cesta son de la marca ecosostenible Bangkok Soap Opera. .
Nutrir el alma
A lo largo de mi estancia, pruebo el menú especial integrado en el programa. El restaurante North me sirve una cena especial diseñada para tener un impacto positivo sobre el metabolismo, para conciliar mejor el sueño y poder optimizar la digestión. Los platos que componen el menú son bajos en grasa, contienen cereales integrales y los productos son de una calidad exquisita.
En esta primera noche, me sirven un tataki de atún, una sopa de verduras y unas vieiras a la plancha con puré de coliflor. Y funciona. La noche me arropa y duermo como un bebé. El lujo también es eso: desconectar del mundo y reconectar de verdad con tu cuerpo y con el descanso. Dormir en el hotel más lujoso de Chiang Mai te hace ese regalo.
Cuidar el cuerpo
El spa del Four Seasons de Chiang Mai es impresionante. Cuenta con 7 cabinas de tratamiento. ¿El motivo de un número tan limitado? Cada una de las cabinas es doble y tiene su propia sauna. Aquí, nadie te mete prisa cuando terminas tu masaje y puedes quedarte un tiempo de relax en tu propia cabina. Todo un detalle que marca una diferencia importante.
Lo visito en mi segundo día, al terminar mi jornada, para disfrutar del tratamiento que incluye mi programa Wellness: la terapia ‘Sleep well’. Durante una hora, la terapeuta usa técnicas de masaje con aceite tradicional por toda la parte frontal de mi cuerpo, desde el cuero cabelludo hasta los pies. El objetivo no es la relajación muscular, sino la relajación mental y corporal. ¡Y vaya si funciona! Me duermo durante gran parte del tratamiento, que precede un baño caliente en una bañera llena de rosas. ¡Maravilloso!
Un desayuno celestial
Pocos desayunos superan el que ofrecen los hoteles Four Seasons. La calidad de los alimentos y platos que proponen en sus buffets es muy difícil de igualar. Y su hotel de Chiang Mai no falla a la norma.
Estación de huevos, sopas asiáticas hechas al momento, botellas de vidrio llenas de zumos frescos naturales, de agua de coco, de smoothies, un surtido de bollería y panes caseros, quesos y lácteos casi imposibles de encontrar en Asia, platos tailandeses y europeos… ¡Hasta un puesto de fruta del día en el que un miembro del hotel te corta la fruta de tu elección en directo!
Todo se hace en un espacio abierto, silencioso, con una luz de película y una energía tan relajante que podrías quedarte horas desayunando. Espacio, silencio, descanso… El Four Seasons de Chiang Mai es el hotel más lujoso del área y entiendo por qué.
Alta gastronomía tailandesa
En la parte superior del hotel se sitúa Khao, el restaurante en el que se sirven los desayunos. Khao también es el restaurante tailandés del resort. Lo elijo para comer al mediodía… y no me arrepiento. Las vistas al arrozal son impresionantes y los platos que componen la carta también.
El servicio es intachable. Tanto el chef como los camareros están constantemente pendientes de los comensales y de sus apetencias, con una delicadeza y una medida perfecta. La carta es muy extensa y ofrece platos tradicionales de cada parte del país, cocinados con maestría y productos de una calidad altísima. El resultado es una explosión de sabores y texturas imborrables.
Mi cena tendrá lugar en North, el restaurante grill del Four Seasons. El escenario es impactante: la campana de la parrilla, alimentada por madera hecha a base de longan, una fruta local famosa en Chiang Mai es una obra de arte. No es de extrañar, ya que su diseño, al igual que el del restaurante, es fruto de la genial y excéntrica mente del prestigioso interiorista Bill Bensley.
La carta ofrece carnes, pescados y platos occidentales que acompaña un delicioso pan casero de masa madre. Ideal para una cena tranquila, que mece el sonido de los grillos que habitan el arrozal.
Una estancia inmersiva
La gran fuerza del Four Seasons de Chiang Mai es, sin lugar a dudas, su capacidad para fundirse con el entorno que habita, por respetar las tradiciones locales y por traerlas a cada detalle de la estancia de sus clientes. Las actividades que ofrecen a los huéspedes siguen esa línea, y hacen que uno conecte con la magia rural del área.
Si te paseas por los arrozales y entre las cabañas, te cruzas constantemente con jardineros, granjeros y artesanos del hotel, y todos lucen el traje tradicional del campo tailandés.
Además, puedes acceder a actividades como las clases de cerámica tradicional, la plantación de arroz o el aseo de los búfalos. Y es que cuatro búfalos habitan el hotel, en un establo localizado al lado del huerto ecológico que alimenta las cocinas del resort.
Todo invita a enfundarse en el traje tradicional a disposición de cada huésped del hotel y a crear recuerdos auténticos y llenos de encanto.
