La inauguración de la nueva flagship store de la hija de Paul McCartney, Stella McCartney, es una fiesta para recordar, en especial porque estuvieron dos eminencias de los noventa presentes.

Por Alba Vázquez

Después de ser protagonista del spotlight internacional con un sencillo vestido blanco de cuello halter y cola, Stella McCartney ha demostrado que está en su momento. Claro que después de hacerle un vestido bespoke a Meghan Markle para su boda, era bastante difícil para la diseñadora volver a ser noticia. Bajo esa idea, entendemos que haya contado con dos eminencias de la industria para la inauguración de su nueva tienda en el vecindario de Mayfair en Londres.

Kylie Minogue, con sus recién estrenadas 50 primaveras, salió al balcón de la exclusiva calle Bond Street para cortar el lazo inaugural. A su lado, además de la diseñadora, de 46 años, uno de los maniquíes más icónicos de la década de los noventa; Kate Moss, de 44 años. El trío de supermujeres celebraron el nuevo hot spot para las amantes de la moda en una fiesta de las que hacen historia.

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Entre los asistente a la cita, una de las protagonistas de Ocean’s 8 con una perfecta falda de animal print, muy ad hoc para la ocasión. ¡Bravo Mindy Kaling!

Con la selección de invitados, la hija del exBeatle, Sir Paul McCartney, demostró que, a pesar del paso del tiempo, las top models y las grandes artistas son como el buen vino; mejoran con el paso de los años. O, al menos, eso es lo que nos ha hecho pensar la diseñadora quien, pudiendo rodearse de esculturales millennials, ha preferido confiar en los clásicos para uno de sus proyectos más ambiciosos.

Y no solo por la ubicación ni por la magnitud de la tienda. Por si aún no te has enterado, la nueva flagship store de Stella McCartney es única en la ciudad. Gracias a su tecnología, basada en filtros de nano carbón que limpian los agentes contaminantes, el espacio se compromete a ofrecer el aire más limpio de la capital inglesa.

Dicha tecnología, según The Huffington Post, no ha sido utilizada hasta ahora en ningún edificio de la ciudad y podría suponer un avance que, según los expertos, sería crucial para una futura experiencia de compra sustentable.

 

Artículo publicado originalmente en Grazia.es
*IMÁGENES: Grosby Group