Moda
Con el reciente anuncio del embarazo de la surrogate de Kim Kardashian, llegan los primeros bebés para Kylie y Khloé. Un negocio redondo para la familia.
Este año se cumplen 10 años del primer episodio de Keeping up with the Kardashians; la serie que nos adentró en la vida de la hasta entonces stylist de Paris Hilton y polémica pareja de Ray J.
Quizás, la razón de la fascinación de un país entero (y más allá) surgiera del mero morbo o quizás, el hecho de que la numerosa familia parecía no tener un filtro.
Sea cual sea, es seguro decir que hoy estamos lejos de olvidarlos, de bajar el control, de dejar de comprar sus lip kits o de dejar de seguirlos en sus cuentas de miles de millones de followers.
La semana pasada cayó una bomba: el anuncio del embarazo de Kylie Jenner. Primero entre rumores y luego, sin ninguna negación que de inmediato pareció confirmarlo.
Mientras el mundo intentaba atar cabos y justificarlo con una teoría –que ella es la surrogate de Kim– cayó una segunda. TMZ reveló que Khloé está embarazada de su primer hijo junto a su novio, el basquetbolista de los Cleveland Cavaliers, Tristan Thompson.
Naturalmente, al ser amados u odiados (así de radicales son las posturas) los comentarios no se hicieron esperar.
Tanto las cuentas de las hermanas como las de sus respectivas parejas se atestaron de comentarios en donde les recordaban del “Kardashian Kurse”. Una supuesta “maldición” que dicta que las carreras de todo quien salga con las hermanas terminan.
Sin embargo, hay quienes consideran que el negocio de casi 2 billones de dólares de la beauty mogul no le caería nada mal al rapero Travis Scott. Uno de los más populares del momento.
Por su parte, Forbes detalló que Khloé aseguró $15 millones de dólares tan sólo el año pasado.
Y cómo olvidar que las exclusivas venden. En 2013, US Weekly compartió que una publicación australiana le ofreció a Kimye $3 millones de dólares por las primeras fotos de North.
Lo veamos por donde lo veamos, parece ser que en este juego no hay perdedores cuando hay dinero de por medio.
¡Lo sentimos Kylie! Tu deseo de llevar una vida normal está lejos de cumplirse…
