La Fashion Week de 2023 en Milán fue testigo de una fusión única entre el Renacimiento italiano y el Arte Povera en la colección de Salvatore Ferragamo.

Esta marca de lujo italiana, con una historia que se remonta a casi un siglo, sorprendió al mundo de la moda con una propuesta que encarna la esencia misma de la artesanía italiana y la sofisticación contemporánea a través de los diseños del director creativo, Maximilian Davis.

La pasarela de Ferragamo se convirtió en un escenario donde el “quiet luxury” se hizo presente. Las creaciones de la marca destacaron por su elegancia discreta y su enfoque en los detalles.

Las prendas en esta colección evocaban reminiscencias del Renacimiento italiano, con vestidos metálicos y abrigos de piel que recordaban la opulencia de esa época dorada. Sin embargo, había un giro inesperado.

Ferragamo también se inspiró en el Arte Povera, un movimiento artístico italiano que celebra la simplicidad y la autenticidad. Esto se manifestó en la elección de materiales naturales y la incorporación de elementos artesanales en las prendas.

La yuxtaposición entre la tradición del Renacimiento y la humildad del Arte Povera creó una experiencia visual única en la pasarela.

La paleta de colores incluyó tonos neutros y terrosos, reflejando la conexión con la tierra y la naturaleza que caracteriza al Arte Povera y algunos destellos de tonos vibrantes como rojos, rosas y verdes.

Además, los zapatos, una parte icónica del legado de Salvatore Ferragamo, se presentaron como verdaderas obras de arte, fusionando la artesanía con la modernidad.

La colección fue un testimonio de la habilidad de la marca para abrazar su herencia italiana y fusionarla con influencias contemporáneas. En un mundo donde el lujo a menudo se asocia con la ostentación, Ferragamo demostró que la elegancia discreta y la autenticidad pueden ser igual de lujosas.

*IMAGEN: Ferragamo