Moda

Seamos sinceras, cuando se trata de lápices labiales todas tenemos una debilidad. ¿A quién no le gusta abrir un lipstick y verlo liso y sin defectos? Pero es una realidad que solo logramos acabarnos unos cuantos de los muchos que compramos porque nos gustó el tono, una amiga nos lo recomendó o ese color estaba en tendencia. Aunque no nos guste escucharlo, existen colores que no van con nuestro tono de piel. La pregunta del millón: “Entonces, ¿cómo logro encontrar el tono de labial para usar una y otra vez?”.
Para aquellas que buscan un color para el diario, pero que no se aleje completamente de su color de piel, la opción es optar por un tono nude. Sin embargo, toma en cuenta que deberás elegir un color de labial arriba del tuyo pues los claros suelen terminar con un aspecto grisáceo y lechoso. Hannah Martin, una reconocida make-up artist, coincide en que esta es una de las reglas básicas cuando se trata de darle un aspecto natural a tus labios.
Las mujeres que buscan algo más atrevido y caen dentro de la categoría de pieles medias, pueden optar por colores extravagantes como morado, naranja e incluso café. Por otro lado, los tonos cálidos son ideales para aquellas con piel beige, bronce o marfil. Los tonos corales rosas o rosas palo son perfecto para las pieles cálidas o pieles claras. En pocas palabras, entre más cálida sea tu piel, más profundo debe de ser el color.
Entendemos que esta información puede resultar complicada. Pero para escoger los labiales según tu tono de piel, le dará luminosidad y brillo a tu semblante. Además, se convertirá en el arma letal cuando te salga algún evento de imprevisto y no tengas tu cosmetiquera a la mano. Siempre busca aumentar tu inventario de lipsticks con tonos que te favorecen —teniendo en cuenta estos sencillos consejos.