Más allá de ser un sombrero, el pillbox hat se convirtió en un referente diplomático gracias a Jacqueline Kennedy; sin duda alguna su accesorio favorito.

El estilo de Jacqueline Bouvier Kennedy, quien fuera Primera Dama de los Estados Unidos de 1961 a 1963, continúa siendo un pilar en el estilo diplomático. Con la nueva ola de miembros de la realeza y primeras damas e, indudablemente, la colección AW18 de Jeremy Scott para Moschino, la imagen de Jackie está más vigente que nunca. Pero si has tenido la oportunidad de pasar fotografías de los momentos más emblemáticos de la neoyorquina, seguramente notaste que el sombrero pillbox era su sello personal.

Sarah Mower traza la historia del emblemático sombrero, atribuyéndole al diseñador estadounidense, Halston, la alternativa que catapultó Kennedy. De ahí que la primera dama hiciera su icónico look un modelo a seguir en la década de los sesenta —traje sastre coronado por un pillbox hat—. Audrey Hepburn incluyó dos creaciones de Givenchy a su guardarropa estelar para la película Charade, estrenada dos semanas después del asesinato de John F. Kennedy.

El pillbox que usó Jackie Kennedy a juego con su Chanel suit el 22 de noviembre de 1963, está perdido. En 2011, Faye Fiore de Los Angeles Times escribió que la última vez que Bouvier fue vista con el emblemático sombrero rosa fue en el Hospital Parkland mientras esperaba conocer el estado de su esposo —este fue pasado a manos de su secretaria personal, quien se rehusa a confesar el paradero del accesorio, de acuerdo a Fiore—.

Quizá lo interesante del accesorio es su verdadero significado, no solo en el estilo de Jacqueline, sino en la diplomacia. En la década de los noventa, Lady Di adoptó el pillbox para complementar sus sets sartoriales y, con la llegada de Kate Middleton a la realeza, la duquesa de Cambridge ha hecho alusión en distintas ocasiones. Otras mujeres diplomáticas que se han unido a la fiebre en tiempos modernos son Carla Sarkozy (una versión mini), la princesa Beatrice de York y la reina Máxima de Holanda (una de sus siluetas favoritas).

En cuanto a Kennedy, el pillbox marcó más de tres años de su vida, su matrimonio con el expresidente, en realidad. Para la inauguración del memorial de John F. Kennedy en Londres, Jackie optó por rendir tributo con una reinterpretación del emblemático sombrero —la simetría de la silueta original fue distorsionada por una ovalada, casi simulando una boina—.

*IMÁGENES: Getty Images y WireImage