Apenas hace unos días, el 29 de julio, Beyoncé estrenó su nuevo álbum Renaissance y la letra de una de sus canciones – Heated – ya está causando polémica, por lo que Queen-B está en la mejor disposición de arreglar lo que haya que arreglar.

Sucede que, como informó su portavoz, la canción – coescrita junto al rapero canadiense Drake – contiene una palabra que es ofensiva para personas con cierto tipo de discapacidad.

Esta palabra es ‘spaz’, abreviatura de ‘spastic’, que en español significa ‘espástico’ y se refiere a “músculos tensos y rígidos”, y produce que los reflejos sean más fuertes o exagerados.

Spaz’ es un término despectivo para la diplejía espástica, una forma de parálisis cerebral, por lo que activistas de esta área dijeron que es muy “ofensivo”.

“La palabra, que no se usó intencionalmente de manera dañina, será reemplazada”, dijo el portavoz de Beyoncé en un comunicado.

Un mes antes, en junio, la rapera Lizzo también usó el mismo término en la canción Grrrls, de su nuevo disco Special, por lo que fue criticada. 

Después de una rápida reacción, Lizzo se disculpó y reemplazó la letra, diciendo que nunca había querido “promover un lenguaje despectivo” y agregó que “como una mujer negra y gorda en Estados Unidos, he tenido muchas palabras hirientes en mi contra, así que entiendo el poder las palabras pueden tener (ya sea intencionalmente, o en mi caso, no intencionalmente)”.

“El compromiso de Beyoncé con la narración musical y visual no excusó su uso del lenguaje rapaz, lenguaje que se usa e ignora con demasiada frecuencia”, escribió en Twitter la escritora australiana y defensora de la discapacidad, Hannah Diviney.

“Lenguaje del que puede estar seguro que nunca lo ignoraré, sin importar de quién provenga o cuáles sean las circunstancias”, añadió.

Pero luego de ser criticada, tras el anuncio del cambio en la letra de la canción, Beyoncé volvió a ser elogiada por aceptar cambiar la palabra.

“Beyoncé tiene un historial de defender la inclusión, y estamos felices de que haya escuchado los comentarios y haya aceptado volver a grabar la letra que muchas personas discapacitadas encuentran ofensiva”, dijo por su parte la organización sin fines de lucro que defiende a personas con diversas capacidades diferentes, Sense.

“Reconocemos que la palabra no se usó intencionalmente para causar daño, pero las palabras tienen poder y pueden reforzar las actitudes negativas que enfrentan los grupos marginados. Queremos agradecer a Beyoncé por escuchar y esperamos seguir disfrutando del disco”, añadió.

¡Bien ahí, Beyoncé!