Nueva York es muchas cosas: ruido, ritmo, mito, caos… y ahora también la nueva parada de la historia de CHANEL. La maison francesa ha presentado su colección Métiers d’art 2025/26 en la ciudad que nunca duerme, en un despliegue que une artesanía extraordinaria, referencias cinematográficas y una oda directa a la diversidad urbana. Una puesta en escena que, además, marca el primer Métiers d’art de Matthieu Blazy como Director Artístico de las Actividades de Moda de CHANEL.

Su inspiración: el metro de Nueva York, ese lugar democrático donde conviven estudiantes, ejecutivos, artistas, madres, socialites y héroes cotidianos. Para Blazy, el subway es “un cruce de culturas donde cada persona viste como protagonista de su propia historia”. Y es exactamente esa energía la que late en la colección.

Un desfile que viaja en el tiempo: de los años 20 a los 2020 

La colección recorre un siglo de estilo —de 1920 a 2020— creando un relato no lineal donde Art Deco, cultura pop, artesanía de le19M y calle neoyorquina se funden en un mismo lenguaje.

Blazy propone un homenaje a Nueva York como ciudad de contrastes: glamour y crudeza, high fashion y cotidianidad, lujo y ironía. Su narrativa mezcla supermodelos y personajes urbanos, socialites con showgirls, working girls con flappers del siglo XXI.

La presencia simbólica de Gabrielle Chanel recorre toda la colección: desde su viaje a la ciudad en los años 30 hasta la manera en que observó cómo los neoyorquinos reinterpretaron su moda en la calle. Ese espíritu libre y democrático es el hilo conductor del desfile.

Un CHANEL profundamente neoyorquino

La colección es, ante todo, un diálogo entre París y Nueva York. Un amor que nació cuando Gabrielle Chanel paseó por la ciudad en 1931 y descubrió cómo las mujeres adoptaban sus prendas con libertad. Aquella mezcla de elegancia y descaro la marcó, y Blazy recupera justamente ese espíritu.

En esta colección, Nueva York aparece en los forros pintados a mano, en los estampados del skyline, en Coco Chanel paseando a su perro por Broadway y en la iconografía pop que late en cada detalle.

El debut de Blazy: un CHANEL audaz, festivo y con guiños inesperados

La propuesta tiene algo irresistible: humor, refinamiento, modernidad y un toque gamberro. El vocabulario CHANEL se reinterpreta con libertad:

Sastrería con alma cinematográfica

Chaquetas perfectas, tweed reinterpretado con aires de lumberjack en lana bouclé, camisas masculinas pesadas con cadenas…

Flappers del futuro

Vestidos Art Deco reconfigurados por Lesage y Lemarié, con plumas, brillo y un aire de fiesta perpetua. Las flappers de 2026 van con “illusion chinos” y actitud superpoderosa.

El denim más CHANEL de la historia

“Lingerie denim”: mezclas inesperadas de vaquero delicado con bordados de alta artesanía. Occidente y Manhattan en la misma prenda.

Animales urbanos convertidos en iconos

Gatos, pájaros, peces Art Deco y motivos animal print reinterpretados en tweeds exclusivos. ¿Gata neoyorquina o superheroína felina? Blazy deja la respuesta abierta.

Accesorios que cuentan historias

Los accesorios merecen capítulo aparte. Blazy convierte los objetos que vemos en los kioscos o en el metro —manzanas, frutos secos, souvenirs turísticos— en minaudières joya con guiños ocultos:

  • Un cacahuete esmaltado.
  • Una manzana neoyorquina convertida en pieza de culto,
  • Una ostra que esconde una perla.

La joyería se vuelve espectacular: collares de ice cubes, colibríes Art Deco y piezas firmadas por Goossens que brillan como vitrales urbanos.

Los Massaro slingbacks, algunos en piel tradicional, otros en shearling moteado, anclan los looks con un toque clásico.

Blazy debuta con una colección que rompe con lo esperable sin traicionar la esencia CHANEL. Hay romanticismo, hay ingenio, hay artesanía del más alto nivel y, sobre todo, hay historia y emoción.

Este Métiers d’art 2025/26 no es un desfile, es una película. Una que empieza en el metro, respira en las calles y termina en el deseo.

*Imágenes: cortesía