Se coló en nuestros hogares con SMS, allá por el año 2006, aunque, siendo sinceras, no nos enamoramos de Mario Casas hasta su romance policiaco con Michelle Jenner en Los hombres de Paco, un año después. Desde entonces le hemos visto compartir pantalla, en cine y televisión, con varias de las mujeres que han tenido la suerte de caminar de su mano en la vida real, como María Valverde o Berta Vázquez. Eso sí, solo Blanca Suárez ha conseguido mantenerse a su lado. —Ya nos parecía a nosotras que después de sobrevivir a un Apocalipsis en El Barco, lo suyo era un romance contra viento y marea—.

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Aunque este chico guapo ya está «pillado», lo cierto es que su atractivo no ha decaído ni un poquito. Su faceta de «chico malo», que se había ganado en Tres metros sobre el cielo, poco a poco ha dado paso a papeles mucho más densos y profundos como su rol de asesino en Contratiempo o su último trabajo en el cine, El fotógrafo de Mauthausen, donde representa uno de los personajes más demandantes, a nivel físico, de su trayectoria.

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Bien pues, no satisfecho con Instinto, el proyecto que comparte con su hermano Oscar para Movistar+, Mario Casas le sonríe ahora a Netflix junto a uno de los actores del momento en la escena española; Javier Gutiérrez. El protagonista de Estoy Vivo y Campeones comparte con Casas el thriller Hogar, de los hermanos Álex y David Pastor, que produce Nostromo Picture para la plataforma de streaming,.

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El dúo compartirá créditos con Bruna Cusí (Premio Goya a Mejor Actriz Revelación por Veranode 1993) y Ruth Díaz (Tarde para la ira, Bajo la piel del lobo) interpretando a Javier,  Tomás, Lara y Marga;, dos parejas en apariencia desconocidas, pero que tienen algo en común: un apartamento.

 

 

Javier Muñoz era un ejecutivo publicitario de éxito, pero, tras un año en el paro, él y su familia se ven obligados a dejar el piso que ya no se pueden permitir. Un día, Javier descubre que aún conserva un juego de llaves de su antiguo piso y empieza a espiar a la joven pareja que ahora vive allí. Poco a poco, Javier empezará a infiltrarse en la vida de los nuevos propietarios, decidido a recuperar la vida que ha perdido… aunque eso signifique destruir a quien se ponga en su camino.

Fotos: Cortesía