Los 30 son una maravilla. Si ya los has cumplido, te habrás dado cuenta y, si te queda poco para llegar a ellos, no tengas miedo de dejar atrás la veintena. Básicamente, y por propia experiencia, se trata de seguir haciendo lo que quieres pero sin que te importe lo que digan los demás de ti. Un alivio en todos los sentidos, ¿no crees? Y menos mal, porque es una época en la que el resto del mundo empieza a esperar que hagas una serie de cosas que tú no tienes por qué querer hacer: casarte, tener hijos, buscarte un trabajo mejor, opositar…

Parece ser que a buena parte del mundo no le interesa que, cumplidos los 30, tu vida siga siendo cosa tuya. Menos mal que a ti te va a empezar a resbalar importar más bien poco todo lo que te digan en beneficio de hacer lo que ¡oh, atrevida! te de la realísima gana. Pero hay una serie de preguntas que son recurrentes y que queremos que identifiques para que, cuando las oigas, puedas responder con un sencillo gesto de desdén y dar media vuelta:

Aham.
Aham.

¿Y cuándo te casas?

Ojalá pudiésemos sonreír y responder con un sincero “¿y a ti qué te importa?”, pero nuestros padres nos educaron muy bien y solo nos atrevemos a pensarlo e imaginarnos tirando a esa persona de los pelos como las locas. El caso es que parece que, si has cumplido 30 años y no tienes planes de boda, es que algo está mal en tu vida. Pues no, todo está tal y como a ti te gusta: divinamente. El cine y las novelas románticas nos han enseñado que la palabra solterona debe aterrarnos, más aún al llegar a la treintena, pero nada más lejos de la realidad. Así que, cuando alguien te salga con el tema del matrimonio, ya sabes:

Preguntas a los 30

 

¿Y para cuando los niños?

LA PREGUNTA por excelencia. Cumples 30 y, al segundo, empiezan a salirte con los niños. Es como si estuviesen toda tu veintena esperando tu treinta cumpleaños para empezar a repetirte lo mismo una y otra vez. De repente, tu reloj biológico existe y todo el mundo está pendiente de él. Estés o no contemplando el quedarte embarazada, los planes sobre maternidad que tengas son cosa tuya y no tienes que compartirlos con nadie más allá de tu pareja si la tienes. Tener un hijo es un paso muy importante que debes dar cuando estés preparada y la opinión del resto del mundo debe darte, simple y llanamente, igual.

Thaaaaaaaaaanks.
Thaaaaaaaaaanks.

¿Y cuales son tus perspectivas de trabajo?

“Vamos a ver, ¿te sirve con que no me despidan?”, piensas. Realmente esta respuesta depende de lo que hayas estado haciendo con tu vida durante la veintena: de si sigues estudiando, de si tienes o no trabajo… Tu vida laboral es cosa tuya y, tal y como están las cosas, ya es bastante complicada de por sí como para añadirle más presión.

Jajajajajajajajaja, NO.
Jajajajajajajajaja, NO.

¿Es [inserte aquí el nombre de tu pareja actual] el definitivo?

Porque está claro que, una vez que elijas, no hay vuelta atrás y, si es el definitivo, mejor que no lo dejes escapar (sic). Si tienes pareja a los 30 es normal que empecéis a plantearos una vida juntos y es bueno que los dos estéis en un mismo punto. Pero eso no significa que, si las cosas se tuercen, no podáis seguir cada uno por vuestro lado. Muy pocas cosas en esta vida son definitivas y una pareja tampoco tiene por qué serlo.

Preguntas a los 30
Pero solo ‘si tal’.

¿Cuándo vas a aprender a cocinar/planchar/coser/etc?

La gente se da plazos para hacer cosas: apuntarse a clases de idiomas o practicar un deporte. Pero, en el tema de las labores domésticas, todo se vuelve más complicado porque no cumplir con ellas correctamente parece que afecta a tu supervivencia. ¿No sabes planchar? Pues tampoco pasa nada; tiende la ropa bien al terminar la lavadora y listo. Y al que no le guste, que no mire.

Cuando alguien intente enseñarte su secreto para cocinar la tortilla perfecta....
Cuando alguien intente enseñarte su secreto para cocinar la tortilla perfecta….

¿Cuándo te vas a comprar un piso?

Sí, comprarse un piso es algo fundamental para la vida adulta o eso parece creer todo el mundo que te rodea. Si no te compras una casa, tus motivos tendrás, así que no consientas que la gente cuestione tu estilo de vida solo porque no eres propietaria. Tus finanzas y tus planes de futuro solo los conoes tú, así que, si prefieres ahorrar para invertir en un bolso de lujo nadie tiene por qué cuestionarlo y nosotras te apoyaremos mucho en este último punto.

Preguntas a los 30