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Inmersa en las aguas azules de la isla, la arquitectura prioriza el bienestar y la privacidad. Junto con la soledad entre la naturaleza, el proyecto integra un espacio de reunión central que incluye un restaurante. el equipo explica: “creemos que transmitir el equilibrio adecuado entre la sensación de soledad y la socialización es crucial “.
El plan maestro incluye cuarenta villas en el agua y diez villas en la playa, cada una diseñada con su propia terraza delantera y piscina, lo que garantiza vistas despejadas al océano Índico. los arquitectos señalan: ‘Aquí es donde un espacio amplio, seguro y privado se encuentra con una de las especies marinas más salvajes del mundo. Esperamos que los visitantes atraigan la sensación de soledad aquí, y también la sensación de ser parte de la naturaleza.
LOS ESPACIOS DE REUNIÓN EN KAGI
El equipo de diseño de Yuji Yamazaki Architecture organiza su retiro en Kagi Maldives en torno a dos centros: el complejo de spa al sur y un complejo de restaurantes al oeste.
Este complejo termal, un espacio de calma y bienestar, se configura como una estructura en forma de anillo que rodea una laguna azul. El programa incluye áreas comerciales, una cafetería, salas de tratamiento, salones de relajación, un gimnasio y un estudio de yoga. Si bien todo el edificio cubre una superficie total de 1.400 metros cuadrados, se erige como una de las instalaciones de spa más grandes de las Maldivas.
Mientras tanto, el complejo de restaurantes está diseñado como un edificio en forma de anillo que rodea un jardín. Aquí se cultivan hierbas y plantas autóctonas que sirven al restaurante y crean otro oasis para los huéspedes.
LA ATENCIÓN DE YUJI YAMAZAKI A LA ECOLOGÍA LOCAL
El equipo dirigido por Yuji Yamazaki tiene como objetivo proteger el ecosistema natural de las Maldivas, construyendo su resort Kagi de manera responsable. La arquitectura del paisaje está meticulosamente planificada para que solo la vida vegetal nativa se integre en el proyecto. En el retiro de Kagi, los visitantes se sumergen en un paisaje de cocoteros, repollo de playa (Magoo), madera de hierro, pino tornillo e hibisco de playa.
Los arquitectos explican el espíritu del proyecto: “ A menudo, vemos paisajes bellamente cuidados con plantas exóticas en los centros turísticos de Maldivas, pero creemos que la introducción de plantas importadas puede generar resultados imprevistos dentro de un ecosistema holístico en el país.
Existe un ecosistema adjunto a las islas existentes en la región y fue parte de nuestra misión crucial minimizar el cambio . En otoño, esperamos ver el regreso de la migración de aves a la isla‘.
