El maximalismo se consolida este 2025 como una de las tendencias más expresivas dentro de la moda contemporánea. Alejado por completo del minimalismo, esta corriente celebra la abundancia, la mezcla de estilos y la libertad estética. El llamado “more is more” se traduce en la posibilidad de construir un atuendo donde convivan lentejuelas, transparencias, tachuelas y colores en aparente contradicción, pero que en conjunto proyectan una identidad fuerte y sin limitaciones.

El corazón del look maximalista está en la combinación. No hay temor a mezclar estampados o a reunir tonalidades opuestas en una misma prenda. El juego cromático puede manifestarse tanto en un choque de colores intensos como en un conjunto monocromático llevado al extremo. Lo importante no es la moderación, sino la intención con la que cada elemento se incorpora al conjunto.

Las texturas desempeñan un papel central en esta estética. El contraste entre materiales lisos y rugosos, o entre superficies brillantes y mates, aporta riqueza visual y una sensación de profundidad. Así, un vestido de tul puede complementarse con una chamarra de cuero o con accesorios metálicos, generando un equilibrio.

Los adornos y detalles decorativos son otro de los pilares del maximalismo. Lentejuelas, pedrería, bordados y transparencias pueden coexistir en una misma prenda, otorgándole dinamismo y dramatismo. Esta superposición de elementos convierte cada look en una composición visual que refleja la personalidad de quien lo porta.

Como ves, el maximalismo implica total libertad de vestirte como quieras, sin preocuparte por verte cargada. Te compartimos algunos looks de inspiración: