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Salma Hayek, fiel a sus raíces mexicanas, compartió el 6 de enero en Instagram una publicación relacionada con la Rosca de Reyes, tradición que como sabes, culmina la temporada de celebraciones navideñas y religiosas para los mexicanos.
En la fotografía se ve a su hija Valentina Pinault Hayek a punto de morder el tradicional pan, junto a la leyenda: “Como todos los años Valentina siempre lista para la rosca de Reyes, y siempre se saca el muñeco”.
Sin embargo, hubo una persona a la que no le gustó lo que escribió, y le comentó: “Eres mexicana y no sabes de tradiciones? Es Niño Dios”. Salma prefirió no ignorar el mensaje, y le respondió: “Señora, tengo 56 años comiéndome esa rosca y encontrando panaderos en todas partes del mundo que me la proporcionen. Por supuesto que sé que ese muñeco representa al niño Dios, pero no es El Niño Dios. Es un muñeco representativo que, por cierto, una tía mía se lo tragó accidentalmente en un día como éste cuando yo era niña. ¡Que vivan las tradiciones!”.
Varios fans de la actriz salieron en su defensa. “Ja ja ja ja, me encanta cómo se enchila Salma. ¡Bien contestado! De cuándo acá se dice: me saqué al Niño Dios”, escribió uno. “TODOS en México le decimos “EL MUÑECO”, por Dios!!! Nadie dice “aaaay me saqué al niño Dios” 🙄 no sean ridículamente religiosos raza”, escribió otro.
Como celebridad internacional, Salma tiene seguidores que hablan distintos idiomas y, como la polémica se dio en español, la actriz no quiso dejar a los demás fuera y escribió sobre su post: “Para todos los que no tienen idea de lo que está pasando en esta publicación. Es una foto de mi hija tratando de comer un pastel especial en nuestra tradición para conmemorar a los 3 reyes magos cada 6 de enero y se llama Rosca de Reyes”.
Salma decidió añadir un tercer mensaje sobre la publicación, para aclarar que ella no hace los tamales del Día de la Candelaria, celebrada el 2 de febrero.
“Los tamales los termina haciendo mi mamá porque le quedan buenísimos. Sobre todo los oaxaqueños. Y cuando digo el muñeco me refiero al muñeco representativo del niño Jesús por qué si pongo El Niño Jesús no falta quien me diga que El Niño Jesús es sagrado y que ese es un muñeco de plástico y también tienen razón. Ya me antojaron los tamales de mi mami”, concluyó.