Moda

En 1919 el arquitecto Walter Gropius fundó una escuela de artesanía, diseño, arte y arquitectura en la ciudad de Weimar, en Alemania. Antes del Bauhaus no existía lo que ahora conocemos como diseño industrial ni diseño gráfico, al menos no como profesión. La Bauhaus también generó un nuevo estilo tipográfico y realizó importantes contribuciones a la arquitectura, la fotografía, la pintura y el teatro, entre otras disciplinas de las bellas artes.
Entre 1919 y 1923, hace un siglo, el taller de teatro dirigido por Oskar Schlemmer era considerado muy importante dentro del programa de la escuela. Las obras de Schlemmer gozaron de mucha fama, sobre todo el Ballet Triádico, estrenado en Stuttgart, Alemania. Fue precisamente Oskar Schelemmer quien en 1922 diseñó el logotipo de la escuela.
Ese logo del Bauhaus pertenece al dominio público, lo que significa que cualquier persona lo puede usar pues no está protegido por ningún tipo de derecho de autor. El logo, al igual que el resto del trabajo realizado en la Bauhaus es un referente que ha inspirado y sigue inspirando a muchos artistas, diseñadores y escuelas de arte. El espíritu de la Bauhaus era abrir un diálogo entre las artes bellas artes.
Si en el centenario de la Bauhaus te estás preguntando qué tiene que ver todo lo anterior con la moda, debes recordar aquella frase de Coco Chanel: “La moda no existe sólo en los vestidos. La moda está en el cielo, en la calle, la moda tiene que ver con las ideas, la forma en que vivimos, lo que está sucediendo”. Por eso el Bauhaus es tan importante en el ámbito de la moda, porque revolucionó el diseño en formas que siguen influyendo en nuestros días. Entre sus principales exponentes se encuentran Walter Gropius, Hannes Meyer, Josef Albers, Ludwig Miës van der Rohe, Lászlo Moholynagy, Wassily Kandinsky, Walter Peterhans, Herbert Bayer, Johannes Itten, Paul Klee, Marcel Breuer y Joost Schmidt entre otros.
En 1933, con la llegada al poder del Adolfo Hitler y el Tercer Reich al poder en Alemania, la escuela fue clausurada por no ser afín con el pensamiento del nuevo canciller. Pero esto no impidió que el movimiento artístico continuara desarrollándose en otras partes del mundo. Muchos de sus ideólogos continuaron trabajando en otros países a los que emigraron durante la Segunda Guerra Mundial.
En 1937 se abrió en Estados Unidos la primera escuela de diseño industrial impulsada por la Asociación de Artes e Industrias de Chicago y teniendo como director al húngaro Lászlo Moholynagy. El programa de estudios estaba basado en la arquitectura Bauhaus, aunque con más énfasis hacia el diseño industrial.
Quizás como una reacción al rechazo del nazismo, la ciudad de Tel Aviv adoptó el estilo arquitectónico con fervor. Hoy en día es la ciudad con mayor número de construcciones Bauhaus en el mundo. Hay destaca el edificio de la Bauhaus de la ciudad de Dessau.
El estilo Bauhaus también llegó a la Ciudad de México y aún hoy se puede observar su arquitectura funcionalista en el Museo Casa Estudio de Frida Kahlo y Diego Rivera (una de las primeras edificaciones de este tipo en América Latina), en algunos casa y edificios de las colonias Roma y Condesa y, más recientemente en el edificio de CENTRO, una universidad especializada en diseño y comunicación.