Es un pintalabios? ¿Es una joya? ¿Es una declaración de arte en miniatura? La respuesta es sí a todo.
Dior vuelve a redefinir lo que significa lujo con el lanzamiento de Rouge Premier, una edición absolutamente excepcional que fusiona dos de sus mundos más exquisitos: la alta joyería y el maquillaje de autor. Una pieza que no solo se aplica, sino que se contempla, se lleva y se guarda como si fuera un tesoro de herencia familiar.

Alta costura para tus labios

Con extracto de hibisco rojo y micropartículas de oro de 24 quilates, la fórmula de Rouge Premier es tan exquisita como su envase. Disponible en 12 tonos de intensidad infinita, está diseñada para magnificar cada sonrisa como si fuera una joya tallada a medida.

Peter Philips, director creativo de maquillaje de Dior, y Victoire de Castellane, alma artística de Dior Joaillerie, han unido su talento en un objeto que va mucho más allá del maquillaje. Es una pieza de colección. Una obra de arte portátil. Un gesto de belleza transformado en experiencia emocional.

Un jardín eterno que se lleva puesto

Inspirada en la naturaleza, una obsesión que compartía el propio Christian Dior, Victoire de Castellane ha imaginado esta pieza como un jardín encantado lleno de flores, insectos y piedras preciosas. Turquesas, ópalos y turmalinas Paraíba se mezclan con lacas pintadas a mano y acabados que parecen recién salidos de un atelier de joyería del siglo XVIII.

Cada detalle ha sido diseñado con precisión: desde el mecanismo de apertura hasta el juego visual de transparencia y opacidad en los esmaltes. La carcasa, que parece sacada de un cuento de hadas barroco, no solo protege la barra de labios: la convierte en objeto de deseo.

Un labial que se convierte en collar (y no es una metáfora)

El momento más inesperado y fabuloso del Rouge Premier llega cuando descubres que puede transformarse en un collar gracias a una cadena dorada con motivos florales inspirados en la colección Mimirose. En un instante, el pintalabios pasa de bolso a joya colgante, permitiéndote llevarlo al cuello como si de un amuleto se tratara. Práctico y poético. Dior en estado puro.

Color, perfume y emoción en un solo gesto

Pero Rouge Premier no se queda en lo visual. También se siente y se huele. Su aroma delicado, con notas de cítricos florales, rooibos, bergamota y té negro, convierte cada aplicación en un ritual sensorial. Y su color, desde rojos intensos hasta nude de subtono rosado, se desliza con precisión joyera, como si cada trazo fuera una pincelada de alta costura.

Rouge Premier no es solo un labial: es una nueva forma de entender la belleza. Una pieza que se admira, se usa, se lleva y, sobre todo, se recuerda. En un momento donde el lujo busca significado más allá de lo material, Dior firma un gesto que combina memoria, creatividad y savoir-faire.

¿La «mala» noticia? Al ser una pieza única solo se ofrece a los clientes especiales en la joyería de la avenue Montaigne de París. 

*Imágenes: cortesía