Durante mucho tiempo se ha hablado acerca de la procrastinación (postergar asuntos importantes), sin embargo existe otro extremo que no es nada bueno para tu salud mental y tu productividad, se trata de la precrastinación.

Si eres de las personas que procura terminar todo antes de tiempo para no tener pendientes, tener todo perfecto y bajo control cuando no es necesario, podrían ser algunos síntomas de precrastinar.

El psicólogo David Rosenbaum acuño este término en 2014, quien lo ilustró con el siguiente ejemplo en la vida cotidiana: “Es como ir al supermercado, llenar la cesta con un montón de manzanas y seguir comprando cargando con ellas pese a saber que volverás a pasar por el lugar en el que se encuentran cuando vayas hacia la caja”, explicó.

“Al precrastinar se toman peores decisiones, porque al estar apresurados por no perder tiempo no reflexionamos para ampliar la visión y considerar otras alternativas”, explica Alejandra Duarte, profesional en productividad y creadora de Productivity School.

A continuación te compartimos algunos tips para ayudarte a dejar de precrastinar.

• Define tus tareas de mayor rendimiento. Hacer una pausa y considerar otros puntos de vista, ayudará a ampliar tu visión de las tareas a realizar.
• Cuando sientas el impulso de hacer algo rápido, implementa un estándar de calidad antes que la cantidad.
• Recuerda que esta preocupación no es real. Procura enfocarte en el para qué y no en la premura de sólo terminar.

Es una realidad que con cualquiera de estos dos extremos lo único que podrás lograr es perder el enfoque, el rendimiento y la productividad.