Moda
La carrera de Taylor Swift está creciendo como la espuma. La cantante recientemente rompió uno de los récords del legendario Michael Jackson, pues cada uno de sus nuevos sencillos la ha hecho ganar y ganar premios y reconocimientos por doquier. Es un hecho que se trata de una artista muy talentosa. Pero por difícil que parezca, Taylor también ha atravesado por varios problemas en su vida y de ellos habla profundamente en el documental biográfico que está a punto de estrenarse en Netflix: Miss Americana.
La cantante confesó haber tenido desórdenes alimenticios que le causaron problemas e inseguridad por años. La estadounidense se sentía muy gorda y encima de todo, tuvo que soportar la presión mediática que criticaba constantemente su cuerpo. Por lo tanto, dejó de alimentarse correctamente buscando el ideal de un cuerpo perfecto que es imposible de alcanzar. De esto nunca había hablado antes, pero ahora que está en la cima del mundo, Swift quiere compartir su historia con otras chicas que están pasando por los momentos que ella logró superar triunfante.
“Veía una foto mía y pensaba que mi barriga era demasiado grande, o… alguien decía que parecía que estaba embarazada… y eso me llevaba a pasar un poco de hambre; dejaba de comer. Recuerdo que cuando tenía 18 años me vi por primera vez en la portada de un revista. Y el titular decía, ‘¿Embarazada a los 18?’. Había sido porque llevaba algo que hacía que mi barriga no pareciese plana. Así que lo asumí como un castigo. Y entonces iba a una sesión de fotos y estaba en el probador y alguien de la revista me decía, ‘Oh, Dios, es increíble que quepas en las prendas de muestra. ¡Normalmente tenemos que modificarlas, pero contigo podemos sacarlas del desfile y ponértelas! Y para mí eso era una palmada en el hombro. Hice ese razonamiento tantas veces, que empecé a pensar en términos de elogios y castigos, también cuando se trataba de mi cuerpo”, confesó Swift en el documental dirigido por Lana Wilson que ya se estrenó en el festival de Sundance 2020.
“No sabía si me iba a sentir cómoda hablando sobre la imagen que tengo sobre mí misma o sobre todo eso por lo que he pasado porque fue muy tóxico para mí; mi relación con la comida y todo eso. Pero la manera en la que Lana lo cuenta, tiene sentido. No he hablado tanto como debería sobre este tema porque hay mucha gente que podría hacerlo mucho mejor que yo. Pero ahora sé que estoy contando mi experiencia. Y con respecto a mi relación con la comida, seguía exactamente el tipo de filosofía que aplicaba a todo lo demás en mi vida: si me daban una palmadita, lo registraba como algo bueno, si me castigaban, era algo malo”, dijo la cantante en una entrevista.
“Pensaba que tenía que sentirme como si me fuese a desmayar al final de un concierto, o en la mitad de él. Pero ahora me he dado cuenta de que no, de que si comes, tienes energía, te sientes más fuerte y no te sientes abatida. Si estás lo suficientemente delgada, no tienes ese trasero que todo el mundo quiere. Pero si pesas lo suficiente para tener ese trasero, entonces no tienes la barriga tan plana. Todo es imposible”, dijo reconciliándose con quien es, con sus logros personales y profesionales, y aceptando que no hay que dejarse llevar por todos los comentarios de la gente.
Podremos ver Miss Americana el 31 de enero en Netflix y ¡no podríamos estar más emocionados!
