Moda
Desigual, surge en España en 1984 por el diseñador Thomas Meyer, el primer diseño que hizo fue una chamarra, que el día de hoy es considerada como una de las primeras prendas de upcycling en el mundo de la moda. El nombre de esta surge de la famosa cineasta española Isabel Coixet, que es reconocida por que comenzó a grabar películas caseras con una cámara de 8mm, hoy en dia ha ganado varios premios Goya y es modelo a seguir de muchos. En aquella época mencionó la palabra “Desigual”, la acompaño con la frase “no es lo mismo” y Thomas supo que así se tenia que llamar su marca. Dos años después, Tonet Sunyer (arquitecto catalán) diseña la primera tienda, en el puerto de Ibiza. Años después Desigual sigue fascinando a personas en todas partes del mundo y continúa con su característica principal, una marca que representa el positivismo, buscando siempre ser autentica y que cada persona que adquiera una prenda de esta, logre ser la mejor versión de sí mismo.
Christian Lacroix es un ícono de la Alta Costura en los ochentas y noventas, estudió historia del arte en París porque soñaba con trabajar en un museo y ser conservador de arte. Mientras estudiaba conoció a su esposa Françoise, mientras ella trabajaba en una boutique de moda, ella fue el motor que impulsó el amor de Lacroix en esta industria.
Comenzó trabajando para Hermés, después para Jean Patou. Poco a poco fue creando su imperio desde cero, debutando y triunfando en la Alta Costura siendo comparado con grandes casas de costura como Dior e YSL, subió como la espuma pero como dicen entre más alto subes, más fuerte es la caída. En el 2009 declaró su empresa en bancarrota ya que sus diseños eran extremadamente caros y nadie los compraba. Sin embargo, Christian Lacroix logro lo que pocos, triunfar en el mundo de la moda. Hoy por hoy sigue siendo un símbolo reconocido que sus diseños siempre han sido originales y aclamados.
La colaboración con el Monsieur Christian Lacroix surge de un lugar de mucho cariño. Thomas Meyer describe su relación como un flechazo, ya que admitió que desde el primer momento que se conocieron experimentaron una gran admiración y respeto mutuo que poco a poco se convirtió en más que una relación profesional, si no que también una amistad duradera. Por el otro lado Christian Lacroix comenta que un día iba caminando por las calles de París, se topó con un abrigo de Desigual e instantáneamente pensó en todas las colaboraciones que podían hacer juntos. Dicho y hecho ya que en diez años llevan 20 temporadas trabajando juntos, la primera siendo en el 2011. Al pasar de los años se puede ver la perfecta fusión que hay entre ambos diseñadores, reflejada en sus colaboraciones.
La nueva colección respeta el ADN de la marca, no obstante es muy diferente que cualquier otra. Desigual se destaca por la creación de prendas que se apeguen a sus valores, la diversidad, la libertad y el inconformismo. Le dan un gran peso a la sustentabilidad y son muy precavidos cuando escogen su materia prima, se fijan que la procedencia de sus materiales, la manera de ser procesados y el suministro de estos, cree el menor impacto posible en el medio ambiente.
La mejor manera de recibir a la primavera es vestirse con colores vibrantes, siluetas innovadoras y estampados alegres.
Lacroix tomo como punto de referencia los tejidos que usaban las clases altas en la época del Rococó y las flores, por qué, que dice primavera mas que estas?
Imagínate Provenza, Francia en el siglo 18. El cielo despejado, ni una nube a la vista, olor a flores, los pájaros cantando, el clima perfecto, un picnic con queso brie, roquefort, un Cotes Du Rhone, fruta fresca y chocolate amargo (Recordatorio: Ahorrar para ir al sureste de Francia y deleitarme con el paisaje que estoy plasmando)………¿Listo? En eso se inspiro el Monsieur Christian Lacroix.
Combinación de colores brillantes, verdes, naranjas, azules y fucsias. Pantalones anchos, crop tops, mangas amplias, faldas y vestidos camiseros que se fusionan con textiles ligeros, colores sobresalientes recordándonos a un verano en Arlés.
Simplemente lograron un balance que muy pocos han podido hacer, una combinación de colores brillantes y estampados floreados que no nos recuerden a los sillones de la abuela.
La colección esta a la venta por tiempo limitado así que corre a echarle un vistazo antes de que se acabe.
Imágenes cortesía de Desigual
