Moda
¿Qué significa realmente el lujo hoy? Para Natura Bissé, el lujo es más que un acabado impecable o un envase sofisticado; es una experiencia transformadora que comienza con el cuidado profundo de la piel. Y con motivo del 25º aniversario de su aclamada Diamond Collection, la casa española nos invita a redescubrir ese significado con un gesto renovado.
Ubicado en ARTZ Pedregal, al sur de la Ciudad de México, el nuevo pop-up de Natura Bissé es una celebración viva de la innovación cosmética y el deseo atemporal.
Rodeado de boutiques de alta gama, el espacio ha sido diseñado para conectar con una nueva generación de consumidores que buscan algo más que resultados visibles: buscan experiencias que conmuevan, que eduquen y que, sobre todo, transformen.
La historia de Diamond Collection comienza en el año 2000, cuando la firma catalana revolucionó la cosmética antiedad al desarrollar una fórmula basada en el poder de la energía celular. Desde entonces, esta colección se ha mantenido como símbolo de sofisticación y eficacia, ganándose un lugar privilegiado en el mundo del lujo consciente.
Pero esta celebración no mira solo al pasado. Con el lanzamiento del Diamond Discovery Set, Natura Bissé plantea una puerta de entrada para quienes aún no han explorado su universo.
Este nuevo formato, accesible y práctico, ofrece cinco tratamientos icónicos en versión travel-size: una solución integral que limpia, hidrata, energiza y rejuvenece la piel, revelando su luminosidad natural desde el primer uso.
La crema que desafió el tiempo ahora se reinventa en una presentación que dialoga con los ritmos contemporáneos. Ideal para probar, para llevar, para regalar. Y sobre todo, para redescubrir.
La promesa de Natura Bissé es clara: una piel extraordinaria no es una meta inalcanzable, sino una posibilidad tangible cuando el cuidado se convierte en ritual. Y esa es precisamente la esencia del pop-up en ARTZ Pedregal: un espacio inmersivo donde ciencia, belleza y emoción se encuentran.
Porque hay fórmulas que trascienden generaciones. Y hay joyas que, como esta colección, no solo se llevan en la piel, sino también en la memoria.
*IMAGEN: Cortesía
