Los polka dots, o lunares, son el sello de Carolina Herrera. Pero el estampado que hoy conquista Good Girl, tiene toda una historia.

En la moda y en su historia, cada firma, cada diseñador, se han hecho de su propio sello. En el caso de Carolina Herrera, los polka dots son su indiscutible emblema. Presentes desde su primera colección en 1981, la diseñadora venezolana ha hecho del estampado uno neutro y trascendental y ahora, los inmortalizó con su fragancia más exitosa, Good Girl, junto a Karlie Kloss.

Los lunares que desde 2000 se han teñido en una paleta más vibrante se fusionan con estampados florales tras la llegada de Wes Gordon como director creativo de la firma. Revitalizando la estética con una cara más fresca e innovadora, la firma complace a las más atrevidas y divertidas. Pero es por medio de las fragancias, esas esencias que evocan recuerdos, que Carolina Herrera convirtió los polka dots en aromas dignos de atrapar sueños.

Con el primer perfume de la firma lanzado en 1988, la diseñadora decide darle su toque especial con lunares negros sobre un fondo blanco. La elegancia, valor que identifica a Carolina Herrera, se funde en un juego que continúa evolucionando. Temporada tras temporada, desde aquella presentación debut en el Club Metropolitan de Nueva York, el estampado ha sido reinventado con la esencia setentera de musas como Pat Cleveland y Jerry Hall. Sin embargo, las eternas del cine, Greta Garbo y Marlene Dietrich, también viven detrás de la inspiración como sinónimo de un glamour trascendental.

Hoy, ese sueño eterno es recitado a través de una colaboración especial con Karlie Kloss. La característica botella de Good Girl, es intervenida por los lunares blancos superpuestos en un fondo negro para convertirla en un Dot Drama. Viva, atrevida, sensual y glamurosa; pilares que concentra el elixir de una mujer buena y sofisticada. Así, el lenguaje estético y emblemático de la tradicional firma inspira y trasciende —algo que la misma Carolina Herrera ha hecho con su impecable estilo—.

*IMÁGENES: Cortesía de Carolina Herrera/Getty Images/Mondadori Photo