Moda

Con la última aparición pública de Meghan Markle como miembro senior de la monarquía británica, estamos nostálgicos de no volver a verla en looks de impacto. La duquesa de Sussex nos acostumbró a su buen gusto y deja un legado de estilo que sin duda nos será difícil olvidar. Siempre siguiendo el apegándose al protocolo real, Meghan le hizo competencia a muchas it girls que imponen tendencia. Hacemos un recuento a sus mejores outfits como royal.
Antes que ningún otro está su bridal look. El vestido minimalista de cuello bateau de Clare Waight Keller para Givenchy fue una sorpresiva elección, pues la costumbre de la familia real es que las novias vistan diseños de firmas inglesas. Aunque la casa es parisina, Waight Keller nació en Birmingham. El velo de cinco metros fue bordado por la flora representativa de cada país que pertenece a la Commonwealth y la flor del estado de California como un guiño a su ciudad natal. Lo coronó la Queen´s Mary bandeau tiara. Como dato curioso, el something blue de la duquesa fue un pequeño recorte del vestido azul que usó para su primera cita con Prince Harry bordado dentro del diseño de Clare.
Para su primer evento oficial como duquesa, Meghan Markle lució un vestido Goat a juego de un tocado firmado por Philip Treacy y pumps Tamara Mellon.
Su primer Trooping the Colour, Meghan lució un off-the-shoulder top con falda a juego de Carolina Herrera. El look causó controversia por ser “exageradamente” revelador para una royal, lo que inició un debate sobre si la duquesa rompió algún protocolo de vestimenta.
Poco después de sellar su amor con Prince Harry, Meghan Markle participó en una visita en solitario con la reina. Para la ocasión, la duquesa lució un impecable vestido Alta Costura Givenchy por Clare Waight Keller.
Su primer Royal Ascot también vino acompañado de un estupendo vestido Alta Costura Givenchy y fascinator por Philip Treacy.
El sencillo pero impactante vestido amarillo firmado por Brandon Maxwell, diseñador estadounidense, lo llevó a uno de sus primeros eventos para reconocer el talento de la Commonwealth.
Siguiendo los pasos de su concuñada Kate, Meghan Markle optaba por lucir Givenchy —la maison detrás de su vestido de novia— en los eventos más importantes. Aquí en el bautizo de su sobrino, Prince Louis.
Aunque Meghan ya había asistido a Wimbledon en años anteriores, nunca se había sentado en el exclusivo Royal Box. Para la final femenil de 2018, en la que participó una de sus mejores amigas, Serena Williams, la duquesa nos dio una lección de estilo con pantalones amplios a juego de una camisa a rayas Ralph Lauren.
El primer look Dior de Meghan Markle fue para conmemorar el centenario de la RAF. Un diseño apegado a la silueta New Look, representativa de la maison, a juego de un tocado Stephen Jones. Dos guiños a su bridal look hizo la duquesa en esta aparición, el cuello bateau y los aretes de diamantes Cartier.
Un día antes de su boda, Meghan lució un vestido azul firmado por Roland Mouret. La duquesa replicó el diseño para su visita oficial en Irlanda, solo que en gris y mangas largas.
Si hay un set que Meghan catapultó como parte del estilo royal, es el power suit. Desde aquella vez que acompañó a su entonces prometido Prince Harry a los Endeavour Awards, la duquesa reafirmó que un traje es la opción más elegante y effortless. Aquí, Markle en un diseño Givenchy para uno de los eventos durante su gira en Irlanda.
No todos los looks de impacto que nos dio Meghan Markle como royal fueron en eventos oficiales. Este, por ejemplo, lo lució en una boda y puso la prueba de cómo una invitada debe ir sin pasar desapercibida. Para la ocasión, la duquesa de Sussex optó por un shirt dress de Club Monaco —que cabe destacar, se agotó en cuestión de horas. Meghan lo complementó con un fascinator negro de Philip Treacy, clutch del mismo tono y su par de pumps Aquazzura favoritos.
Además de impulsar firmas inglesas y estadounidenses, Meghan siempre buscaba el momento para mostrar el talento canadiense. Para conmemorar el centenario de Nelson Mandela, Markle lució un trench dress en rosa pastel de House of Nonie. Su bolso del mismo tono fue Mulberry.
En su gira oficial por Sudáfrica, la duquesa repitió el diseño cuando conoció a la esposa del expresidente.
Meghan le dio ese sentido effortless, pero con mucha elegancia, al verde. Para su primera visita a Sussex, Meghan Markle combinó una camisa de & Other Stories con una falda lápiz en cuero de Boss y bolso Demi Gabriela Hearst. La joyería le dio un upgrade inesperado, pues contrastó piezas doradas.
Tras dar el anuncio de su embarazo, durante su gira oficial por Australia y Oceanía, la duquesa de Sussex hizo brillar su baby bump tomando una lección de estilo de Kim Kardashian. Fue para la cena de estado ofrecida por el Presidente de Fiyi que Meghan lució impecable en un cape dress de Safiyaa. Complementó sublimemente con artes de diamantes estilo candelabro.
Uno de sus últimos vestidos para su gira por Australia fue un diseño en tul de Laura Kim y Fernando Garcia para Oscar de la Renta.
En su viaje oficial a Marruecos, Meghan Markle quiso hacer un guiño a su país natal al llevar un vestido maxi bespoke de Wes Gordon para Carolina Herrera.
Su penúltimo evento como royal no podía ser sencillo. La duquesa de Sussex asistió al Mounbatten Festival of Music en un sublime diseño Safiyaa, pumps Stuart Weitzman, aretes tipo candelabro Simone Rocha y clutch Manolo Blahnik.