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Justin Baldoni, director y protagonista de It Ends With Us, demandó a su expublicista Stephanie Jones por supuestamente filtrar los mensajes que desataron el pleito legal contra Blake Lively.
Además, en la demanda, presentada el viernes en un tribunal federal de Nueva York, se sumó Jennifer Abel, quien era la encargada de la cuenta de Baldoni en Jonesworks PR, empresa de Stephanie Jones.
La empresa de Stephanie representaba al actor y a sus estudios Wayfarer cuando el reporte de The New York Times destapó el problema entre Blake y Baldoni, con la publicación de una demanda que contenía los mensajes que Baldoni envió a la actriz y por los cuales ella lo acusó de abuso sexual y represalías durante el rodaje de la película.
Jennifer era socia de Stephanie y decidió abrir su propio negocio. Según la demanda, ella fue obligada a entregar su teléfono personal.
“Es innegable que Stephanie Jones inició esta catastrófica secuencia de eventos al violar los derechos más básicos a la privacidad, así como la confianza que aún les quedaba a sus clientes”, dijo el abogado del actor, Bryan Freedman, a Variety.
“Acostumbrada a provocar situaciones de crisis para los clientes que se marchan, la Sra. Jones entregó maliciosamente las comunicaciones del teléfono que le quitó injustamente a su socia para su cómplice, [la publicista personal de Lively] Leslie Sloane, inmediatamente después de que Jones fuera despedida con causa por Wayfarer debido a su propia conducta indebida”, aseguró.
La denuncia de Baldoni y Jennifer Abel afirma que Jones planeó una venganza contra ellos cuando ambos anunciaron sus planes de dejarla.
Esta es la sexta demanda relacionada con el caso de las partes involucradas en la película.
Y aunque hubo la poca promoción de la pelícua, se trató de un éxito indesperado para Sony, recaudando 351 millones de dólares en taquilla mundial con un presupuesto de 25 millones de dólares.
