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Toda la vida se nos ha dicho que jugar videojuegos o tanto tiempo de uso de pantallas, causa un efecto dañino en los niños.
Pero un nuevo estudio apunta a lo contrario: que jugar videojuegos tiene un efecto inesperado en el coeficiente intelectual de niños y jóvenes.
Si bien la diferencia en las habilidades cognitivas fue pequeña y no es suficiente para mostrar una relación causal, es suficiente para ser notable.
Este estudio publicado por un grupo de científicos en Scientific Reports, tuvo cuidado de tener en cuenta variables que incluyen diferencias en la genética y el entorno socioeconómico del niño.
En contraste con actividades que también implican ver una pantalla, como observar programas de televisión y usar las redes sociales, no pareció tener un efecto positivo o negativo en la inteligencia.
¿Cuánto tiempo de uso de pantallas es adecuado?
Por supuesto, esta investigación abrió un debate sobre cuánto tiempo de pantalla es adecuado para las mentes jóvenes.
“Los medios digitales definen la infancia moderna, pero sus efectos cognitivos no están claros y se debaten acaloradamente”, escriben los investigadores Bruno Sauce, Magnus Liebherr, Nicholas Judd y Torkel Klingberg.
“Creemos que los estudios con datos genéticos podrían aclarar las afirmaciones causales y corregir el papel típicamente no explicado de las predisposiciones genéticas”, añaden en el estudio ‘El impacto de los medios digitales en la inteligencia de los niños mientras se controlan las diferencias genéticas en la cognición y el entorno socioeconómico’.
Los investigadores observaron los registros de tiempo de pantalla de 9,855 niños de 9 y 10 años en Estados Unidos.
En promedio, los pequeños informaron pasar 2.5 horas al día viendo televisión o videos en línea, 1 hora jugando videojuegos y media hora socializando en redes sociales.
Luego, los investigadores tuvieron contacto con más de 5,000 de esos niños dos años después.
Durante el período intermedio, aquellos en el estudio que informaron pasar más tiempo de lo “normal” en los videojuegos vieron un aumento de 2.5 puntos de coeficiente intelectual por encima del aumento promedio.
El aumento de estos puntos de coeficiente intelectual se basó en el desempeño de los niños en tareas que incluían comprensión de lectura, procesamiento visoespacial, el uso de la memoria, el pensamiento flexible y el autocontrol.
Estudio “limitado”
Los oponentes a esta investigación han hecho notar que el estudio solo analizó a los niños en Estados Unidos y que no diferenció entre los tipos de videojuegos: móviles versus juegos de consola.
“Nuestros resultados respaldan la afirmación de que el tiempo de pantalla generalmente no afecta las habilidades cognitivas de los niños y que jugar videojuegos puede ayudar a aumentar la inteligencia”, dijo en su defensa el neurocientífico Torkel Klingberg, del Instituto Karolinska en Suecia.
Como señalan los investigadores, este no es el primer estudio que sugiere que podría haber un vínculo entre el tiempo que los niños pasan jugando y el desarrollo de sus habilidades cognitivas, y también parece haber otros beneficios asociados con los videojuegos.
“No examinamos los efectos del comportamiento de la pantalla en la actividad física, el sueño, el bienestar o el rendimiento escolar, por lo que no podemos decir nada al respecto”, añade Klingberg.
