Inspiración de entre las nubes en prendas abrigadoras y contundentes para la época más fría del año.

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Si pudiéramos pensar en una forma de describir a la mujer Hermés de la siguiente temporada, sería una piloto chic. La firma hace del cuero su principal elemento y lo transforma en chamarras, sacos, pantalones y faldas.

Cuatro estampados entran a contraste: Paisley, cuadros, manos y llaves voladoras, mientras que los tejidos se hacen presentes de forma interesante en suéteres-camisas, cuellos de tortuga, chalecos y vestidos midi. En las blusas, suceden capas, mangas abombadas, holanes y algunas de combinan con skinny scarves y foulards al cuello.

Los sutiles detalles de rombos y líneas trazadas sobre algunas de las prendas, les aportan un pequeño twist. Contornean las orillas de otras tantas o se convierten en tirantes.

De los clásicos, no pueden faltar los abrigos y chamarras boxy que intensifican el concepto aviator; las hay en el icónico camel o en bloques de color que van del turquesa al azul y finalmente, a los morados. El toque final lo ponen las botas de agujeta que llegan hasta la rodilla, los cinturones de distinto grosor y los gorros tejidos.