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El Gran Premio de Las Vegas 2024 fue escenario de una noche inolvidable en la Fórmula 1, marcada por la coronación de Max Verstappen como tetracampeón y una destacada actuación estratégica de Sergio Pérez.
La carrera, celebrada en el deslumbrante circuito nocturno, fue una mezcla de tensión, espectáculo y destreza técnica.
Verstappen, tetracampeón indiscutible
A sus 27 años, Max Verstappen selló su cuarto campeonato mundial, un logro que lo acerca a leyendas como Michael Schumacher y Lewis Hamilton. Aunque no subió al podio en esta carrera, el piloto neerlandés terminó quinto, priorizando asegurar el título sobre buscar una victoria arriesgada.
Con este campeonato, Verstappen reafirma su estatus como uno de los grandes del deporte, incluso en una temporada marcada por problemas mecánicos en el RB20, que dejaron a Red Bull sin el campeonato de constructores, dominado por McLaren.
La carrera fue liderada por los Mercedes de George Russell y Lewis Hamilton, quienes lograron un contundente 1-2, aprovechando la falta de un Safety Car, algo inesperado en este circuito urbano.
Sergio Pérez: un estratega en la pista
El piloto mexicano brilló al remontar del lugar 15 al décimo, sumando puntos cruciales y dejando una lección de manejo estratégico. Pérez sorprendió al iniciar con neumáticos duros, una elección poco común que le permitió extender su primer stint. Posteriormente, mostró su habilidad con los compuestos medios, que resultaron problemáticos para otros pilotos.
Su doble adelantamiento a Kevin Magnussen y Liam Lawson en las últimas vueltas destacó su precisión y competitividad.
Aunque no logró superar a Yuki Tsunoda en la recta final, la actuación de Pérez fue un recordatorio de su talento en la gestión de neumáticos y su capacidad para adaptarse a condiciones adversas.
Una carrera para recordar
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El Gran Premio de Las Vegas no solo celebró la excelencia individual de Verstappen y Pérez, sino también el espectáculo que la Fórmula 1 puede ofrecer en escenarios icónicos.
Con la ciudad iluminada como telón de fondo, este evento se consolidó como uno de los más emocionantes de la temporada, marcando un hito tanto en lo deportivo como en lo mediático.
La Fórmula 1 continúa demostrando por qué es el pináculo del automovilismo, combinando drama, técnica y la constante búsqueda de la perfección.
*IMAGEN: Google Images
