Para celebrar su aniversario crearon L’ Atelier du Parfum de Ultrafemme. En este museo efímero en los pasillos de Ultrafemme en Luxury Avenue en Cancún podrás vivir una experiencia única. Hay seis mesas olfativas, que representan a las distintas familias olfativas. A través de una cata a ciegas podrás descubrir distintos aromas, conectar con ellos y decidir cuáles son tus favoritos. Tuve la suerte de visitar esta exposición. Me encantó que percibes los aromas sin saber qué marca es, o si es sin género o de hombre o mujer.

También, hay dos Tasting Rooms uno de Ultrafemme y otro de Chanel. Al agendar una cita podrás vivir una master class con expertos perfumistas.

Además, para apoyar a la economía local todas las mesas de madera y los mouillettes de cerámica fueron creados de manera 100% artesanal en Cancún.

Hasta el 16 de enero podrás vivir en la boutique de Luxury Avenue en Cancún y Los cabos esta experiencia.

Para saber más sobre todo lo que hay detrás de Ultrafemme entrevistamos a Elena Villarreal, creadora hace 47 años de este negocio de perfumerías. Autora del libro Perfume. Pasión y Seducción, que recopila sus apuntes sobre todo lo que ha aprendido del mundo de los aromas.

Grazia: ¿Qué es lo que más te apasiona del mundo de la alta perfumería?

Elena Villareal: Yo siempre te he dicho te vas a acordar de cómo olía tu maestro de kinder pero no te vas a acordar como era. Entonces son esas cosas que se me han quedado grabadas en la mente. Yo antes estaba en tienda y conocía muy bien las notas olfativas de lo que manejaba.

G: ¿Cuéntanos sobre alguna memoria olfativa?

Elena Villareal: A mi mamá en algún momento mi papá le regaló una botellita de Joy. Es chistoso pues es una fragancia súper dulce. Mi papá para alagar a mi mamá va y le compra una botellita de Joy. Que se quedó en el tocador por toda su vida porque mi mamá era una persona amarga. Mi papá sin saber nada le compró algo que estaba de super moda. Es ese conocimiento de todo lo que implica saber cómo es una fragancia en la piel.

Ga: ¿Cuéntanos sobre las mesas olfativas?

Elena Villarreal: Es toda una experiencia hacer una cata a ciegas. Porque tú dices yo nunca hubiera probado una fragancia de alguna marca y cuando la experimentas y escuchas el porqué de ser de esta fragancia tienes otra experiencia. Algo que puedes compartir y que no vuelves a ver el perfume con los mismos ojos, y menos con la misma nariz.

G: ¿Qué aroma te recuerda esos años en los que iniciaste con tu primera perfumería?

Elena Villarreal: Desde muy chica me enamoré de Chanel N5 porque era el perfume que tenía mi abuela en su tocador. Entonces cómo viví soñando yo voy a tener un perfume de Chanel N5. Cuando me casé con Pepe vivíamos en Chetumal y no teníamos absolutamente nada. Me acuerdo de que iba a la perfumería de mi competidor y no podía comprarla. Y era como asociar la opulencia de mi abuela y que tenía sus botellas grandes de Shalimar, de Chanel. Y decir, algún día yo voy a poder comprar buenas fragancias y no solo para mí sino también para enseñarle a otras personas a lo que huele algo refinado, bonito, lujoso.

G: ¿Cuál ha sido el mayor reto que has vivido a lo largo de tu carrera?

Elena Villarreal: Yo creo que el empezar. Nadie me quería vender porque la competencia estaba muy fuerte. El reto de pensar que sabía todo, pero en realidad no sabía nada. Negociar una marca de lujo, pues no es lo mismo que negociar tuercas y tornillos. El hecho de tener que trabajar en un mundo de hombres siendo yo muy joven. Cómo adquirir lo que quería sin tener que venderme. Está abriendo ahí el changarrito de la esquina, pero mi tienda estaba muy linda.

G: ¿Qué consejo le darías a las mujeres jóvenes que desean emprender?

Elena Villarreal: Creo muchísimo en la mujer, no hemos tenido las mismas oportunidades. Pero ya ahorita tenemos educación y conocimientos. Creamos vida, el hombre no puede hacerlo. Muchas de las mujeres que trabajan conmigo, sostienen la familia y las han sacado adelante.

G: ¿Cuéntanos sobre los perfumes Seajewels de Ultrafemme?

Elena Villarreal: Trabajé 15 años detrás de un mostrador, escuché que el cliente constantemente pedía un perfume de Cancún. Entonces le dije a Pepe mi marido que teníamos que crearlo, lo desarrollamos en Nueva York. Quería una flor blanca porque son las que se dan aquí, notas de limón y mandarina, con algo verde que representará la selva, aceite de coco y maderas de ceiba. Además, quería que fuera turquesa como el color del mar del caribe. Pepe se encargó de diseñar las botellas, una estrella de mar, un caracol, un caballito y una concha

Es un producto que está muy bien posicionado, pero pronto tendrá algunos cambios.

Elena está trabajando en un libro para celebrar los 50 años de Ultrafemme. Ha estado en contacto con las personas que trabajaron con ella en su primera perfumería. Está recopilando fotos y memorias para poder contar la historia de su empresa, que mucho ha dado a las familias de Chetumal y de Cancún.