Moda
La moda confirma que todo regresa, pero nunca de la misma forma. El boho setentero reaparece esta temporada como una declaración de estilo que prioriza la libertad, la comodidad y la expresión personal. En el centro de esta tendencia se encuentran las faldas largas, piezas que conectan pasado y presente a través del movimiento, la textura y una feminidad sin rigidez.
Inspiradas en los años setenta, estas siluetas rescatan el espíritu libre de una década marcada por la creatividad y la individualidad. Hoy se reinterpretan con una sensibilidad actual que apuesta por el equilibrio entre nostalgia y sofisticación.
Siluetas fluidas que acompañan el movimiento
Las faldas largas boho se caracterizan por cortes amplios, caídas suaves y estructuras pensadas para acompañar el cuerpo en cada paso. No buscan definir en exceso, sino fluir. Pliegues delicados, capas sutiles y cinturas marcadas aportan estructura sin perder ligereza.
Esta temporada, la clave está en cómo se mueven las prendas. Caminar con una falda boho es parte del look, ya que el movimiento se convierte en un elemento estético más.
Colores y estampados con alma natural
La paleta cromática refuerza el vínculo con la naturaleza. Tonos tierra, marrones suaves, beige, verde oliva y matices crudos dominan la escena. A ellos se suman estampados florales difuminados, gráficos artesanales y motivos étnicos que aportan carácter sin saturar.
Estas faldas invitan a construir looks sensoriales, donde la textura y el color cuentan una historia visual coherente y relajada.
Cómo llevarlas del día a la noche
Una de las grandes fortalezas de las faldas largas boho es su versatilidad. Durante el día, funcionan con blusas ligeras, tops de punto o camisas relajadas. Por la noche, basta con añadir un top estructurado, joyería protagonista o un cinturón llamativo para elevar el conjunto.
El boho actual no se limita a lo casual, también puede ser elegante, pulido y perfectamente editorial.
Moda consciente con espíritu libre
Más allá de la estética, esta tendencia dialoga con una forma de consumir moda más reflexiva. Materiales naturales, procesos artesanales y prendas pensadas para durar refuerzan el valor de estas faldas como piezas clave del armario.
El regreso del boho setentero no impone reglas, invita a explorar. ¿Te sumas a esta estética que celebra el movimiento, la identidad y la libertad personal?
*IMAGEN: Google Images
