Todos pensamos que después de su renuncia como miembros senior de la realeza, Meghan Markle y Prince Harry están disfrutando de una tranquila “vida normal” en Vancouver Island, Canadá. Pero es posible que estemos muy equivocados. Analizando cómo ha sido la vida para ellos desde que supieron que serían padres del pequeño Archie, lo más probable es que ese “encierro” en la nueva mansión en la que viven, no sea de descanso sino de inteligente planeación.

Una fuente cercana a la pareja dijo a la revista People que los duques de Sussex “están disfrutando de vivir una vida tranquila. Van a dar largos paseos, hacen yoga y Meghan cocina. Son verdaderos hogareños a quienes les encanta relajarse con Archie y los perros”. Sí, claro, ¿a quién podría no gustarle una vida así? Sin embargo, no podemos dejar de preguntarnos si eso es todo o si se están preparando para su triunfal regreso a la vida pública.

Esta es la razón por la que dudamos que todo sea únicamente descanso. El año pasado, cuando Meghan Markle y Prince Harry supieron que se convertirían en padres, abandonaron el palacio de Kensington para instalarse en Frogmore Cottage, en Windsor, y estuvieron desconectados por varios meses, salvo escasas apariciones públicas por compromisos a los que no podían faltar. Pero, de manera muy inusual, cuando Meghan dio a luz y terminó su descanso por maternidad, todas sus actividades profesionales comenzaron a fluir a demasiada velocidad, haciéndonos pensar que en realidad la duquesa de Sussex no se dedicó a descansar y por el contrario aprovechó ese tiempo fuera del ojo público para trabajar, hacer alianzas, llamadas y reunirse en privado con las personas exactas. ¡Plan maestro!

Es por eso que en cuanto pudo separarse de manera más prolongada de Archie, de inmediato se convirtió en la editora invitada de una revista, creó una colección de ropa para una fundación que ayuda a expresidiarias a reincorporarse a la vida laboral, colaboró con una pastelería, entre muchas otras cosas. Así que no, Meghan no descansó como seguramente no lo está haciendo ahora. De hecho, así lo dijo un amigo de ellos a People: “Estos planes toman mucho tiempo y el personal está haciendo el trabajo preliminar para prepararlo adecuadamente y asegurarse de que cumpla con las expectativas y las ambiciones de la pareja”.

Eso sí, según una fuente asegura al mismo medio, Markle sintió gran alivio al regresar a Canadá: “Puedes decir que se sintió menos estresada”. Además, la pareja está haciendo todo lo posible por tener una vida normal como padres. “Archie y Harry se divierten juntos. Y Meghan es una gran mamá. Ella se preocupa por atenderlo”, declara el testigo.

 

*IMAGEN: Getty Images