Moda

Los cerezos florecen, los rayos de sol se cuelan entre las hojas y las temperaturas nos invitan a dejar atrás las capas pesadas. La primavera ya está aquí, y con ella, la oportunidad perfecta para redefinir nuestro estilo. Pero no se trata de seguir cada micro tendencia: esta temporada apostamos por la inteligencia sartorial.
Te presentamos cinco inversiones imbatibles que elevarán tu look sin fecha de caducidad.
El vestido maxi: versatilidad en clave boho

¿Evento formal? ¿Brunch de domingo? ¿Paseo por la ciudad? El vestido largo se adapta. Con encajes delicados, estampados florales o en blanco puro, esta prenda combina comodidad y silueta femenina. Úsalo con sneakers para romper con lo predecible o con merceditas para un aire romántico.
La blazer sastre: estructura con estilo

Nada como una americana bien cortada para lograr un look pulido. Este año, juega con cortes oversize, cinturas marcadas y tejidos fluidos como el lino o la viscosa. ¿Color? Atrévete con los pasteles o mantente fiel al clásico camel. Arrástrala desde la oficina hasta el café del sábado.
El trench perfecto: funcionalidad clásica

No hay primavera sin gabardina. Ideal para días frescos, esta pieza sigue siendo un básico, pero con giros actuales: largos extra, cortes rectos o sin solapa, y una paleta que va del beige al azul bebé. El layering nunca falla.
El chaleco largo de lino: nuevo esencial

Del corte masculino al ajuste hourglass. Esta versión renovada del chaleco es ideal sobre faldas midi o pantalones de lino. ¿Look relajado? Llévalo con camiseta blanca. ¿Más formal? Hazlo parte de un dos piezas sin mangas.
El bolso trenzado: textura que enamora

Este año los bolsos hablan en clave artesanal. Olvida la rafia: las tiras de cuero trenzadas conquistan en versiones estructuradas y tonos tierra. Práctico, bello y de espíritu estacional, este accesorio será el toque final de todos tus looks. ¿Con cuál te quedas?
*IMAGEN: Google Images