Moda
Prada hizo de Chicago objeto de su nueva exhibición. Un diálogo que se sumerge en el talento que se respira en sus calles.
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Por María José Gonzálvez
La moda y el arte son una combinación perfecta, como la sal y la pimienta, y Prada es una de las firmas que más ha apoyado proyectos a lo largo de la historia.
Esta vez, Fondazione Prada investiga el arte urbano y conceptual de las décadas de los cincuenta y sesenta en Chicago.
Bajo la premisa de que la ciudad es un parteaguas en el arte, que ha inspirado a múltiples artistas contemporáneos, abre un diálogo que explora el impacto político en la sociedad (durante la postguerra) de la mano del curador Germano Celant.
La exhibición se divide en tres partes —“León Golub”, “H. C. Westermann” y “Famous Artists from Chicago. 1965-1975”— y consta de una serie de revelaciones artísticas que promueven la prosperidad humana y que rompen con las fronteras “establecidas”.
Desde su concepción, Fondazione Prada ha presentado varias muestras que cuestionan la estética y la sociedad del presente. En un diálogo entre el diseñador Raf Simons y Miuccia Prada, la diseñadora explica:
“Yo creo que es curioso como lo que he aprendido a través de la moda, ha influenciado mucho a la Fondazione, porque la moda es muy libre —al menos en nuestras mentes— y creo que uno de mis retos ahora es demostrar como mi trabajo de diseñadora puede ayudar a mejorar mi trabajo dentro de la Fondazione”.
Miuccia ha roto varios paradigmas dentro de la industria, y fue así como logró convertirse en inspiración.
“Cuando estaba empezando este trabajo, a finales de los sesenta y principios de los setenta, se sentía como si fuera el peor momento para ser un diseñador de moda. Era la revolución feminista y yo era de izquierda, trabajando para el partido [comunista], aún así me encantaba la moda y eso predominó”.
Irrigando su estética, Prada logró que sus ideales fueran transmitidos, encontrando una fuerte conexión —similar al proyecto de Chicago.
La diseñadora tiene una extensa relación con el arte y la arquitectura. Por ello, las muestras que se llevan a cabo en el recinto reflejan sus más grandes aspiraciones e ideales.
Es así como esta nueva exhibición, como cualquier otra alojada en el espacio de Prada, se concibe. Para ella, compaginar en el mismo canal a estas dos fuerzas, va más allá de lo que cualquier individuo pudiera pensar.
Sin el arte la moda no existe, y sin la moda, la expresión social no tiene sentido.
*El proyecto estará en la Fondazione Prada, Milán, a partir del 20 de octubre hasta el 15 de enero de 2018.
