Chanel volvió a su emblemático escenario en el Grand Palais por primera vez en cuatro años, recibiendo a una multitud de clientes y amantes de la moda bajo su recientemente renovado techo de cristal.

La luz del sol iluminaba el lugar, creando un ambiente vibrante en el que los asistentes disfrutaban de la ocasión, tomando selfies y elogiando los atuendos de los demás. Sin embargo, a pesar del júbilo, el vacío dejado por la ausencia de un director creativo generó una oleada de especulaciones en la industria.

¿Quién asumirá el cargo? Las opiniones son diversas, desde la necesidad de un talento de marketing hasta el deseo de contar con una mujer en el puesto.

Para esta colección de primavera, el equipo creativo de Chanel se inspiró directamente en la arquitectura del Grand Palais. Las piezas más destacadas se confeccionaron a mano, reflejando los patrones del impresionante trabajo en hierro y acero del edificio.

La ligereza y la efervescencia fueron los conceptos que guiaron la creación de la colección, logrados a través de faldas con aberturas que dejaban ver las piernas, cuellos formados por capas de suaves plumas, capas de gasa que fluyen con el viento y zapatos de plataforma que aportaban un toque juvenil a los looks.

Un elemento llamativo de la pasarela fue una enorme jaula de pájaros, que evocaba un célebre comercial de Chanel dirigido por Jean Paul Goude y protagonizado por Vanessa Paradis en 1991.

Las modelos transitaban entre los barrotes, una representación visual del legado de la casa y su evolución a lo largo de los años. Además, el equipo creativo introdujo innovaciones en la icónica tela de tweed de la marca, utilizando tonos pastel y reemplazando el clásico traje de falda por uno de pantalones cortos.

También sorprendieron con una chaqueta de denim negro y jeans adornados con brillantes lentejuelas negras, capturando la esencia de las jóvenes que trabajan en la “accesorización” del taller.

La colección primavera-verano 2025 de Chanel es una oda a la libertad, la delicadeza y el movimiento. Con capas de gasa, faldas abiertas y pantalones fluidos, cada pieza celebra la esencia de una mujer moderna que busca la ligereza en su vestuario.

El desfile no solo presentó moda, sino un mensaje de emancipación y estilo que continúa resonando en el legado de Gabrielle Chanel. Así, Chanel reafirma su posición en el mundo de la moda, innovando y celebrando su rica historia al mismo tiempo.

*IMAGEN: Cortesía