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Taylor Swift canceló tres conciertos en Viena, Austria, debido a una posible amenaza de seguridad. Los espectáculos, parte del Eras Tour, estaban previstos para este jueves 8, viernes 9 y sábado 10 de agosto en el estadio Ernst Happel.
Las autoridades austriacas detuvieron a un joven de 19 años el miércoles pasado, quien, según informaron, tenía planes de llevar a cabo un atentado suicida en un concierto de Taylor Swift en Viena. La intención del chico, según su confesión, era “eliminar a una gran cantidad de personas” en un evento que prometía ser uno de los más memorables del año.
El joven, quien habría jurado lealtad al grupo terrorista Estado Islámico (EI), confesó estar listo para ejecutar un ataque utilizando explosivos y cuchillos. Como consecuencia, los tres conciertos de Swift programados en el estadio Ernst Happel, que ya habían agotado todas las entradas, fueron cancelados. Se esperaba una asistencia masiva de más de 195,000 fans.
Los medios locales informaron que el adolescente había sustraído productos químicos de su antiguo trabajo, donde estaba empleado en una fábrica de procesamiento de metales en Ternitz, su ciudad natal.
Según el diario Kurier, el joven había avanzado considerablemente en la construcción de un artefacto explosivo. Además, el informe sugirió que también había considerado la posibilidad de embestir a la multitud con un automóvil, que estaría reunida en las afueras del estadio.
Durante una conferencia de prensa, las autoridades se mostraron cautelosas al no revelar el origen exacto de los químicos. Sin embargo, el director de seguridad pública, Franz Ruf, informó que las sustancias y los dispositivos técnicos encontrados en la casa del sospechoso indicaban “preparativos muy concretos”. Por su parte, el jefe de la agencia de inteligencia austriaca, Omar Haijawi-Pirchner, reveló que en la casa del joven se incautaron armas y que “su objetivo era suicidarse mientras causaba la muerte de una gran cantidad de personas en el concierto”.
Ruf también mencionó que el joven había publicado un video en internet donde detallaba su siniestro plan, había dejado su trabajo a finales del mes pasado y comentado a varias personas que tenía “grandes planes” en mente.
Las autoridades también identificaron a un segundo sospechoso, un joven de 17 años de ascendencia turca o croata, que trabajaba para una empresa contratada para prestar servicios en el estadio donde Taylor Swift se presentaría. Un tercer implicado, de apenas 15 años, se ha negado a colaborar con las autoridades y fue detenido en las inmediaciones del estadio.
En Europa, Taylor se ha presentado en Francia, Suecia, Reino Unido, Irlanda, Países Bajos, Italia, Alemania y Polonia. Después, se dirigirá a Londres la próxima semana para ofrecer cinco conciertos en el estadio de Wembley.
