Muchos adjudican el rompimiento a un asunto de karma, ¿será?

Los noventas siempre serán recordados por muchas cosas, entre ellas, una de las power couples más representativas de la década: Jennifer Aniston y Brad Pitt. Los dos american sweethearts conformaron una mancuerna perseguida, fotografiada y amada por toda la nación.

En 2006, la burbuja se rompió –al igual que los corazones de muchos– cuando tras conocerse en la grabación de “Mr. and Mrs. Smith”, Angelina Jolie y el actor, iniciaron una relación que resultó en el divorcio de este y la famosa Rachel de “Friends”. Doce años (y seis hijos) después, Brangelina llega a su fin entre alegatos de infidelidad y adicciones, que además incluyen a Marion Cotillard en la ecuación. Muchos aseguran que la francesa y Brad tendrían un amorío que sería el final straw para Angelina, quien citó diferencias irreconciliables en su petición de divorcio.

 

 

En México tenemos la idea de que alguien que te engaña una vez, te engañará dos y hasta tres veces más y ese es el argumento bajo el cual usuarios de redes sociales, comenzaron a citar con el hashtag #TeamJennifer. Según reporta US Weekly, sería la propia actriz quien al enterarse de la ruptura lo declararía “un asunto de karma”, lo que sí es un hecho, es que la línea de tiempo de esta relación se ha tornado cada vez más truculenta con detalles que poco a poco, continúan emergiendo.

El hermetismo con que se manejó la pareja incluso en estos momentos, quedó de manifiesto en una entrevista de George Clooney –amigo íntimo de la pareja– con CNN. Tras cuestionarlo, el actor se mostró sorprendido y declaró: “Es un triste y desafortunado suceso para una familia. Me siento muy apenado al respecto”.

 

Jennifer ha sido una de las celebridades que poco ha podido separarse del ojo acusador de Hollywood. Primero incasable, después el tema de su peso, luego infértil y ahora, (sin quererlo) este asunto le ha devuelto un poco de justicia a la actriz ¡y por mano del público!