Amy Schumer fue diagnosticada con síndrome de Cushing, una condición hormonal que – según ha explicado la actriz y comediante – la hizo estar alerta de una posible situación médica luego de que los fans en Internet se burlaran de su “cara hinchada”.

Y sí, la hinchazón es real, pero no por gordura o circunstancias normales. De acuerdo con la Clínica Mayo, “la afección ocurre cuando hay demasiado cortisol (la principal hormona del estrés) dentro del cuerpo durante mucho tiempo. Los posibles síntomas incluyen aumento de peso, presión arterial alta y pérdida ósea. El tratamiento puede incluir medicamentos, radioterapia o cirugía”.

Amy reveló su diagnóstico en la edición del viernes de News Not Noise, de la comunicadora Jessica Yellin, días después de que los fanáticos comenzaran a preguntarse por qué tenía una cara “más hinchada” durante su gira promocional para la temporada 2 de Life & Beth.

La actriz dijo que se enteró de su condición mientras promocionaba su programa y se siente “renacida” luego de recibir un diagnóstico.

“Mientras hacía prensa frente a la cámara para mi programa de Hulu, también estaba en máquinas de resonancia magnética durante cuatro horas seguidas, con mis venas cerradas por la cantidad de sangre extraída y pensando que tal vez no estaría presente para ver crecer a mi hijo. Así que descubrir que tengo el tipo de Cushing que se solucionará solo y que estoy saludable fue la mejor noticia imaginable”, dijo Schumer.

La comediante dijo que “tener la intervención de Internet” sobre su apariencia la ayudó a saber que algo andaba mal.

“Han sido un par de semanas locas para mí y mi familia. Aparte de los temores sobre mi salud, también tuve que estar frente a la cámara y tener acceso a Internet. Pero gracias a Dios por eso, porque así fue como me di cuenta de que algo andaba mal”, agregó.

“La vergüenza y la crítica de nuestros cuerpos en constante cambio es algo con lo que he tenido que lidiar y ser testigo durante mucho tiempo. Deseo muchísimo que las mujeres se amen a sí mismas y sean implacables cuando luchen por su propia salud en un sistema que normalmente no les cree”, dijo, sobre compartir su información médica personal.

“Todo el mundo está luchando con algo”, añadió. “Tal vez todos podamos ser un poco más amables unos con otros y con nosotros mismos”.