La alfombra roja del Festival de Cine de Cannes 2025 se iluminó con la presencia de Alejandro González Iñárritu, quien regresó para la proyección de Amores Perros en una versión restaurada, además de compartir el nuevo proyecto artístico que trae entre manos.

A 25 años del estreno de la cinta que revolucionó el cine mexicano, Iñárritu fue invitado a presentar una proyección especial de Amores Perros como parte de la sección Cannes Classics. El director mexicano también hizo el anuncio de una instalación artística basada en material inédito de la película que se encuentra en los archivos de la UNAM.

Esta instalación – que se exhibirá primero en la Fundación Prada, en Milán, y luego en Los Ángeles y en la Ciudad de México – será un viaje inmersivo en salas oscuras, con proyectores de 35 mm y múltiples pantallas, para explorar los silencios, los errores y las emociones que nunca llegaron a la versión final del filme.

“El milagro es que almacenamos todas esas latas de material en la cinemateca de la Universidad de México”, dijo. “Estas latas llevan 25 años [ahí], como el vino”, dijo el cineasta al crítico estadounidense Elvis Mitchell.

“Desde mi punto de vista es como una placenta, el bebé es el filme”, agregó.

Desde su multipremiada Birdman hasta este tributo poético a sus raíces cinematográficas, Iñárritu demuestra que siempre está dispuesto a romper las reglas, desafiar los formatos y compartir su manera de ver al mundo.