Seguramente has sentido cómo algunos días tienes más energía que otros, mientras que en ciertos momentos de la vida te sientes más cansada, malhumorada, y desganada. Esto es normal hasta cierto grado, pues nuestra frecuencia o vibración energética varía dependiendo de algunos factores de la vida diaria.

Sin embargo, existen técnicas que podemos poner en práctica, que ayudan a elevar esta frecuencia energética. Te contamos sobre ellas.

“Nuestro cuerpo está compuesto por partículas que producen energía debido a que están en constante movimiento o vibración. A esta vibración se le conoce como frecuencia energética. Cuando las vibraciones se encuentran en un nivel alto, todos los aspectos de nuestra vida se encuentran en equilibrio y se puede lograr un gran crecimiento personal”, explica Sandra Elisa ‘Panterita’ Roch, fundadora de “SER By Panterita”.

Es importante que puedas reconocer tu frecuencia energética para que en caso de que sea baja puedas elevarla y vivir una vida más plena y saludable. Es relativamente fácil reconocer tu nivel de frecuencia energética. Si te sientes distante emocionalmente, constantemente irritado, fatigado o enfermo, tu frecuencia energética puede encontrarse en niveles bajos. Por el contrario, si disfrutas todas las experiencias de tu vida, sientes un equilibrio emocional, gozas de buena salud y tienes relaciones personales agradables, plenas y satisfactorias, tu nivel energético es alto”, añade.

¿Lista para aprender sobre estas técnicas?

Practica yoga: El hecho de practicar yoga te permite hacer una introspección sobre las condiciones de tu mente y cuerpo, además de que el movimiento controlado hace que la energía vibre más fácilmente.

Medita: La meditación ofrece grandes beneficios como disminuir el estrés, mejorar la concentración y el estado de ánimo, lo que además te permitirá mejorar diferentes aspectos de tu vida, como las relaciones interpersonales, la buena salud, el sueño y el control de peso a través de la alineación de los chakras. Aprende más sobre esto, aquí.

Realiza actos de generosidad: Si tienes sentimiento de avaricia, no es posible que tu energía vibre en una frecuencia alta. Lo que brinda felicidad a tu vida no está fuera de ti. Ofrece tu tiempo, atenciones o incluso cosas materiales a otras personas y verás como pronto regresan a tu vida multiplicadas.

Practica el agradecimiento: La gratitud es uno de los elementos más poderosos para vibrar de manera positiva y vivir en plenitud. Haz de la gratitud un hábito y cambiará tu perspectiva de la vida. Si siempre agradeces lo que tienes y las experiencias que vives podrás empezar a sentir muy pronto la alta vibración que esto te traerá.

Aprende a perdonar: Todos vivimos situaciones desagradables que incluso nos pueden llegar a dañar. Sin embargo, es importante aprender a perdonar a las personas que causan un agravio. De no hacerlo, existe el riesgo de estancarse en pensamientos negativos y baja vibración. Al perdonar podrás avanzar y crecer.

Ten pensamientos positivos: Una buena actitud ante las situaciones que se te presentan, en especial ante las adversidades, te permitirá tener tranquilidad para poder elevar la frecuencia energética. La clave para mantener esta vibración es evitar actitudes y situaciones de negatividad.

“Cuando tu frecuencia energética es alta, los demás te perciben como una persona positiva a la que quieren en sus vidas. Así podrás construir, junto con ellas, una vida plena y en equilibrio”, concluye Panterita.

*IMAGEN: Unsplash