Moda
El fin de semana pasado se hizo un llamado internacional a protestar contra la mala administración gubernamental de la gran mayoría de los países con relación al calentamiento global. Las principales capitales del mundo prestaron espacios para que decenas de miles de jóvenes, adultos y niños —sí niños—, salieran de clase temprano y/o pasaran su fin de semana manifestándose para traer consciencia sobre lo que pasa en el mundo. El Climate Strike, acción impulsada por la niña sueca de 16 años, Greta Thunberg, se lleva a cabo hasta el 27 de septiembre y coincide con el Climate Action Summit que toma lugar el 23 de septiembre en la sede de la ONU en la ciudad de Nueva York.
Aunque infinidad de celebridades y personalidades fueron parte de esta protesta, lo que hizo de esta algo insólito y especial fue la participación de los niños. Esto es de esperarse ya que la activista, Greta Thunberg, se convirtió en abanderada de la protesta cuando inició su labor frente al parlamento sueco. La joven nativa de Estocolmo se reunió con el secretario general de la ONU, António Guterres, y dió un discurso donde acusó a los lideres del mundo de haberle robado la infancia con promesas falsas.
La realidad es que tenemos menos de 12 años para mejorar nuestras prácticas y poder preservar un mundo vivible.
Aunque el problema no se erradicará de la noche a la mañana, debemos crear conciencia sobre el uso del plástico, evitar el uso del PVC, acabar con la crueldad hacia los animales, entender que es obligatorio reciclar, propugnar prácticas consientes con el uso del agua a nivel civil e industrial.
La moda también toma acción
Como Greta y además de Stella McCartney, Marina Testino se ha enfocado en crear campañas para crear conciencia sostenible y que trabajan en función de un mundo mejor. Testino promovió #OneDressToImpress para reflexionar sobre lo pernicioso del consumismo masivo. Esto lo hizo vistiendo el mismo traje rojo durante dos meses para diferentes eventos de moda, trabajo y labores cotidianas. Luego impulsó #YellowLikeALemon para promover marcas sostenibles a la hora de vestirse —para ello solo usó amarillo por dos meses. Incluso la marca de cosméticos sostenible (la única del mercado) La Bouche Rouge creó un balm amarillo para que lo usara durante ese tiempo. Su mas reciente campaña #WeSeaThrough fue una cápsula editorial donde Marina y sus amigos se tomaron fotos muy delicadas sin ropa para atraer la atención sobre los desechos de microplásticos en el planeta y cómo estos contaminan nuestros océanos. El fotógrafo Danilo estuvo a cargo de documentarla.
A partir de este momento, es hora de comprometernos a nivel personal y tomar acción. Debemos informarnos de cómo podemos poner nuestro granito de arena y poco a poco, pero con cierta prisa, cambiar nuestros hábitos para colaborar en salvar al planeta. Si los niños del mundo están tomando una conciencia real para mejorar el medio ambiente, debemos seguir su ejemplo y trascender de la publicación divagadora. No por nosotros sino por esos pequeños valientes cuya causa es completamente honesta.
