La duquesa de Sussex ha dado otra muestra de su forma de pensar al seguir exponiendo temas relacionados con el empoderamiento de las mujeres. Esta ocasión alzó la voz respecto al tan criticado cuerpo postparto de las mujeres, realidad que no se entiende y de la que pocos esfuerzos se han hecho para cambiar la percepción.

Meghan Markle, mamá del pequeño Archie de casi tres meses de edad, quiere ser una inspiración para las nuevas mamás para que luzcan con seguridad esa pancita postparto, tal como lo ha hecho ella desde el momento en que dejó el hospital donde dio a luz.

“No es fácil perder peso, pero ella está feliz con ser un ejemplo real para las nuevas mamás”, dijo una persona cercana a la esposa de Prince Harry. Además dijo que, como cualquier otra mujer, está trabajando en tener buena salud y en verse bien, por lo que está “en una dieta a base de plantas” y “hace diariamente yoga y meditación” para abordar de mejor forma la maternidad.

A diferencia de Meghan Markle, su cuñada Kate Middleton ha salido del hospital mucho más arreglada, con sus bebés en brazos a la altura del vientre, mostrando casi nada de esa pancita postparto, lo que siempre fue bien visto hasta que llegó Meghan a darle una lección de realidad.

En un embarazo de nueve meses el cuerpo entero de la mujer sufre cambios y la barriga se estira de manera impresionante, por lo que es imposible esperar que de un día para otro dejen de existir la pancita restante, la flacidez, las estrías, etc. Sin embargo la sociedad espera que salgamos del hospital como si nada hubiera pasado, y volvamos a los tacones, a la ropa ajustada y a esa “perfección” esperada lo antes posible, sin tiempo para recuperarnos. 

¡Aplausos para la duquesa de Sussex!

*IMAGEN: Getty Images