Moda

Es hora de que los finalistas del LVMH Prize exploten y lleven su creatividad al límite. Este año, el tema es la ecología y sostenibilidad.
La creatividad y esfuerzo que el LVMH Prize tiene este año han saltado fronteras, con mares de sudor y días sin descanso. Los diseñadores, que forman parte de la lista con más diversidad desde que se inauguró el premio, ayudan a celebrar el talento mundial de diseño, con nacionalidades de Sudáfrica, Israel, Noruega, Estados Unidos e Inglaterra. Este año, además de ser el más inclusivo, el número de solicitudes enviadas para participar alborotó el ambiente, rompiendo el récord con 1,700 aplicaciones.
Los finalistas tendrán el reto de explotar su estética y plasmarla en todas y cada una de sus creaciones. El jurado, en el que se extrañará las aportaciones y visón de Karl Lagerfeld, exigirá en todas las prendas creatividad y una gran conciencia ética y sostenible.
La lista de los ocho diseñadores, incluye a Anrealage por Kunihiko Morinaga, Bethany Williams, Bode por Emily Adams Bode, Hed Mayner, Kenneth Ize por Kenneth Izedonmwen, Phipps por Spencer Phipps, Stefan Cooke y Thebe Magugu. Todos tendrán que cumplir con los requisitos, para ello, la mayoría de los finalistas ocuparán materiales reciclados como parte de su estrategia de abastecimiento.
Estos jóvenes talentosos se reunirán por última vez con el jurado en el mes de junio, en la Fondation Louis Vuitton de París, donde el jurado tomará la decisión del ganador, quien será recompensado con €300,000 y recibirá un seguimiento personalizado junto al conglomerado de lujo. Los tres jóvenes graduados de escuelas de moda, es decir, los más pequeños, recibirán €10,000 al igual que se podrán unir al portafolio de marcas de LVMH.