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La segunda noche de Dua Lipa en Ciudad de México se transformó en un momento histórico cuando la artista británica invitó a Fher Olvera al escenario para interpretar juntos Oye mi amor, uno de los himnos más emblemáticos de Maná. El Estadio GNP Seguros estalló en energía pura al presenciar una colaboración que, más allá del factor sorpresa, celebró la conexión emocional que existe entre la música internacional y la tradición mexicana.
Desde el inicio del Radical Optimism Tour, Dua Lipa ha demostrado una sensibilidad especial para honrar la identidad de cada país que visita. En México, ese gesto alcanzó un nuevo nivel al unir su voz con la de uno de los músicos más influyentes del rock en español. La química entre ambos artistas fue inmediata. Lipa aportó su estilo moderno y magnético, mientras que Fher Olvera sumó la potencia característica que ha marcado la carrera de Maná durante décadas.
El público vivió un momento irrepetible. Miles de asistentes corearon la canción desde el primer acorde, guiados por la mezcla de nostalgia, sorpresa y celebración que definió la presentación. Visualmente, la puesta en escena acompañó la energía del dueto con iluminación cálida y una vibración íntima que contrastó con el carácter expansivo del estadio. La interpretación logró equilibrar la esencia del tema original con un toque fresco que solo Dua Lipa podía aportar.
Esta colaboración se suma a la serie de homenajes musicales que la cantante ha realizado en América Latina. En su primer concierto en la capital mexicana interpretó Bésame Mucho, y en países como Argentina, Perú, Chile y Brasil adaptó clásicos que reflejan la identidad de cada región. Su intención es clara: crear un puente emocional con el público a través de piezas que forman parte de su memoria colectiva.
En un momento donde las giras globales buscan propuestas más significativas, Dua Lipa destaca por su capacidad de integrar cultura, emoción y espectáculo sin perder autenticidad. La participación de Fher Olvera elevó ese gesto a un nivel profundamente simbólico. Más que un dueto, fue un reconocimiento a la música mexicana desde una perspectiva contemporánea y global.
Con dos noches consecutivas llenas de euforia y un tercer concierto aún por celebrarse, la presencia de Dua Lipa en México confirma su habilidad para convertir cada presentación en una experiencia inolvidable. Y si algo dejó claro esta interpretación de Oye mi amor, es que la artista continúa escribiendo momentos que trascienden fronteras.
*IMAGEN: Google Images
