Moda

Carlos Alcaraz se ha consolidado no solo como una estrella indiscutible del tenis mundial, sino también como un inesperado referente de estilo en las canchas.
Cada uno de sus looks revela una evolución que va más allá del deporte: frescura juvenil, innovación cromática y una clara conexión con las tendencias que dominan la moda contemporánea.
Desde los conjuntos sobrios en tonos neutros hasta apuestas vibrantes como el total look púrpura del US Open 2025, Alcaraz demuestra que el tenis puede ser también una pasarela. Sus elecciones estilísticas son prueba de que el futuro del deporte viste con personalidad.
El impacto de un color

Carlos Alcaraz sorprendió en el US Open 2025 no solo con su juego, sino con un total look púrpura que ya marca tendencia global. Shorts en tono berenjena, camiseta sin mangas rosa y chamarra a juego encendieron la moda deportiva, mientras las codiciadas Nike Vapor 12 en púrpura aún no llegan al mercado.
Este debut cromático confirma la estrategia de Nike de usar los Grand Slams como pasarela de tendencias. Más allá de la cancha, el púrpura se convierte en un símbolo de elegancia atlética y juventud, consolidando a Alcaraz como referente de estilo y poder cultural.
Poder en tonos sobrios

En su primer look, Carlos Alcaraz luce un conjunto monocromático en auzl firmado por Nike. El atuendo, compuesto por camiseta técnica y shorts a juego, transmite minimalismo y modernidad.
El corte limpio resalta la fuerza física del deportista, mientras las zapatillas blancas con detalles en turquesa añaden frescura y un guiño futurista. El puño en alto completa la imagen de un atleta decidido que convierte cada punto en un acto de estilo.
Elegancia en Wimbledon

El segundo conjunto, totalmente blanco, es un homenaje a la tradición de Wimbledon y a la vez una muestra de cómo la sobriedad puede convertirse en tendencia.
El uniforme compuesto por camiseta ligera y shorts clásicos se realza con zapatillas de silueta aerodinámica. La pureza del blanco resalta en el contraste con el césped, reafirmando la conexión entre el legado del torneo y la juventud del jugador. En movimiento, cada prenda se percibe como parte de una coreografía entre moda y rendimiento.
Energía gráfica en la cancha de césped

El tercer look es un despliegue de dinamismo. Carlos apuesta por una camiseta con franjas diagonales en negro, blanco y verde aqua, que rompe la monocromía habitual del vestuario tenístico.
Combinada con shorts negros y muñequeras en turquesa, la propuesta destaca por su toque gráfico y urbano. Aquí, el deporte se convierte en pasarela: cada desplazamiento, cada sprint y cada golpe proyectan un estilo moderno con alma juvenil.
*IMAGEN: Instagram